El método de destilación se aplica para la obtención de bebidas de variadas características, como son los diferentes tipos de brandy, licores, también para el whisky, ron y vodka, entre otras.

En México la mayoría de los destilados provienen de los diferentes tipos de agave que hay en todo el país y de los cuales se obtiene una bebida con ciertas características y que distingue a cada una de las regiones donde se produce, los más populares son:

El agave azul del que se obtiene el tequila, que se produce principalmente en Jalisco al igual que la raicilla que tiene como base las variedades del agave lechuguilla y maximiliana; la variedad Dasylirion con el que se prepara el sotol de Durango, Chihuahua y Coahuila; también está el agave Angustifolia con el que se produce el bacanora bebida típica de Sonora.

El mezcal también es un destilado de agave que se elabora en siete estados de la República Mexicana pero que a diferencia de los anteriores, para su elaboración se utilizan igual cantidad de variedades de magueyes entre las que destacan: maguey ancho, espadín, potosino, serrano y el maguey cenizo.

Estas bebidas se han revalorizado y reposicionado tanto en su lugar de origen como en toda la República. Su tradición y calidad los ha llevado a cruzar fronteras y hoy el mundo puede disfrutar de este obsequio mexicano: los destilados de agave.

¿Sabías qué?
El agave es endémico de América y de sus aproximadamente 200 especies, 150 se encuentran en México.