Se hace agua a la boca cuando en este mes de diciembre comenzamos a ver en el menú los romeritos como una opción para pedir a la hora de comer. Y es que es en esta época cuando llegan a México estos deliciosos quelites.

Los quelites son plantas de uso en la cocina tradicional que crecen en la milpa, la palabra quelite viene del vocablo náhuatl quilitl que significa verdura o planta tierna comestible y tiene su equivalente en varias lenguas. 

En México se consumen más de 350 especies de quelites, los cuales han sido seleccionados por las tradiciones locales de los distintos pueblos originarios, entre los más populares se encuentran el pápalo, quintonil, huazontle, verdolaga, epazote, hoja santa y romeritos. 

Los romeritos son un alimento que en la época prehispánica se preparaban con ahuautles, que son huevecillos comestibles de un mosco acuático que vive cerca de los lagos. Su sabor es parecido al camarón, por lo que con el tiempo se ha sustituido este elemento por camarón en polvo para hacerlo en tortas.

El cultivo de romeritos tiene mayor presencia en el Estado de México y la Ciudad de México, su producción en el 2020 fue de 3 mil 627 toneladas lo cual representa un valor de 15 mil 621 pesos. 

Los romeritos o revoltijo son un platillo que en México los acostumbramos comer en navidad o año nuevo, pues son una opción perfecta para quienes no comen carne roja o para quienes disfrutan del sabor de diferentes ingredientes juntos en un plato, pero que al probarlos, disfrutamos de sus sabores y texturas.

No importa como los prepares, cada familia tiene su receta, lo importante es seguir preparándolos con elementos del campo mexicano y seguir con la tradición de comerlos en fechas decembrinas.