Pedro Miguel Morón Chiclayo: vida, activismo y muerte

Uno de los episodios con mayor número de violaciones a los derechos humanos en la historia de México fue la Guerra Sucia. Durante la década de 1970, se llevaron a cabo una serie crímenes de lesa humanidad, en la que cientos de personas fueron desaparecidas, torturadas y asesinadas a manos de la Dirección Federal de Seguridad (DFS). Uno de los principales grupos víctima de esta institución fue La Liga Comunistas 23 de Septiembre, la cual llevó a cabo una conjunto de acciones en las que participaron cientos de activistas en su búsqueda de una revolución social en México. Por ejemplo, el doctor Pedro Miguel Morón Chiclayo.

Fotografía 1: Pedro Miguel Morón Chiclayo presentado por la DFS.

Pedro Miguel Morón Chiclayo nació el 8 de octubre de 1947 en Chiclayo, Perú. En un inicio, estudió dos años de Economía y Administración en la Universidad de San Marcos, Perú, donde comenzó a simpatizar con ideas de izquierda desde su ingreso. Sin embargo, lo que realmente le apasionaba era la medicina, por lo que, en 1966, decidió viajar a la Ciudad de México para ingresar a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y estudiarla.

Durante su estancia en la UNAM, conoció a diversas personas con las que compartió ideas políticas. Participó indirectamente en el movimiento estudiantil de 1968, ya que, al ser extranjero, las autoridades lo vigilaban de cerca. Aunque no asistió a ninguna manifestación, mitin, concentración u otra actividad pública debido al seguimiento personal que el gobierno mexicano mantenía sobre los extranjeros, apoyaba activamente al movimiento.

Se casó con Blanca Estela Cervantes en diciembre de 1971. Ambos creían que el verdadero cambio se lograría únicamente por la vía armada y no por la pacífica como sostenía en ese entonces el Partido Comunista Mexicano. Al año siguiente, su padre falleció, lo que provocó que la ayuda económica que recibía de su familia terminara. Esto agudizó sus necesidades económicas, para mitigarlas recurrió a diversos doctores en búsqueda de trabajo.

Fotografía 2: Expediente de Morón Chiclayo que contiene sus huellas dactilares

De igual manera, decidió regresar a la facultad de medicina, donde coincidió con Francisco Toledo, un médico que fue su profesor durante la carrera. Toledo lo presentó con Alfonso Rojas Díaz, con quien, a través de diversas platicas y debates, descubrió ser afín en simpatías políticas. Más tarde, Alfonso le presentaría a un grupo armado clandestino al que Pedro y su esposa se unieron.

El grupo se llamaba Liga Comunista 23 de Septiembre, una organización guerrillera que logró agrupar a diversos grupos, comandos y colectivos en un solo frente socialista, uno de los más grades en la historia de México. Pedro se convirtió en el médico del grupo. Su trabajo consistió en cuidar y proteger la salud de los miembros de la organización, bajo los sobrenombres de “Esteban” o de “Doc”.[1]

El “Doc” instaló una clínica clandestina donde atendió a los miembros de la liga que resultaban heridos en combate, realizó desde suturas hasta operaciones. Además de brindar atención médica, también fue de los fundares de la Brigada Roja, sección de la Liga que se caracterizó por su alto nivel teórico-ideológico y su objetivo de agitación y propaganda ente la población mexicana.