Estos archivos, que se encuentran resguardados por el AGN, forman parte de los fondos de Dirección de Investigaciones Políticas y Sociales (1924-1982); Dirección Federal de Seguridad (1947-1971); y Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal. La solicitud se hizo por parte de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y del Archivo General de la Nación (AGN),  al amparo del artículo 30, fracción II de la Ley Federal de Archivos, en el que se establece que:

“El Instituto o la autoridad equivalente en los sujetos obligados distintos al Poder Ejecutivo Federal podrán determinar procedente el acceso a información confidencial con valor histórico cuando el interés público en el acceso sea mayor a cualquier invasión a la privacidad que pueda resultar de dicho acceso”.

Mercedes de Vega, titular del AGN, fue la encargada de dar la bienvenida a los asistentes, quienes se congregaron en lo que antiguamente fue la Penitenciaría de Lecumberri, lugar donde hace 50 años estuvieron presos varios líderes del movimiento del 68; y que hoy es la casa de la memoria de México.

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Reconoció el arduo esfuerzo de todas las instituciones que colaboraron para la construcción de la colección histórica M68: Ciudadanías en movimiento, señalando que la apertura histórica al público de estos archivos enriquece la posibilidad de conocer la protesta estudiantil; y de otros movimientos sociales previos y posteriores que han impulsado el reconocimiento de los derechos en México.

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Agregó que con esta plataforma digital, los documentos permitirán nuevos proyectos para el estudio, además de contribuir a preservar y divulgar la memoria nacional, la reconstrucción de los hechos, así como distintos procesos de búsqueda de la verdad, justicia y reparación, tal como se señaló en el dictamen del INAI.

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Por su parte, Francisco Javier Acuña Llamas, comisionado presidente del INAI, sostuvo que los integrantes de este organismo tomaron una decisión técnica histórica de gran trascendencia, al determinar que, por interés público, se abrieran documentos que bajo la figura de archivos confidenciales históricos permanecieron cerrados.

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El diputado Alejandro Encinas, próximo subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, destacó la trascendencia de desclasificar estos archivos, pues servirán para reconstruir una etapa fundamental de la historia reciente del país y fortalecer el derecho a la memoria y a la verdad de los hechos para hacer justicia, como un principio fundamental de la reparación del daño; y como una garantía para que estos sucesos no se vuelvan a repetir. Y prometió revisar la posibilidad de que también se desclasifiquen archivos de la Secretaría de la Defensa Nacional y del Estado Mayor Presidencial.

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Por último, el rector de la UNAM, Enrique Graue Wiechers, mencionó que el trabajo de conservar, organizar y poner a disposición documentos históricos tiene la finalidad de que no se olvide lo ocurrido; porque es a través de la historia documental, conservada, organizada y catalogada, que la verdad puede surgir sin dobleces o cortapisas. Hizo un reconocimiento al INAI por liberar esta información, debido al interés público y al valor histórico que posee. Con esta acción, documentos como fotografías de marchas y protestas, listado de víctimas, registro de huellas digitales y reportes de filiaciones políticas de los integrantes del Movimiento Estudiantil, que pertenecen a los fondos reservados de la Secretaría de Gobernación, de la extinta Dirección Federal de Seguridad (1947-1971) y de la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, entre otros archivos oficiales, se sistematizarán y digitalizarán para que puedan ser consultados de forma sencilla y ágil.

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Cabe señalar que todos estos documentos se sumarán a la Colección M68. Ciudadanías en Movimiento, el repositorio del Centro Cultural Universitario Tlatelolco, que da libre acceso a más de 100 mil objetos vinculados a los movimientos sociales, políticos y culturales más significativos de México, desde 1968 hasta la fecha.

Estos materiales, que se pueden consultar en el sitio web www.m68.mx, contienen fotografías, caricaturas, mantas, entrevistas, volantes, manuscritos y expedientes gubernamentales.

En la ceremonia, denominada Declaratoria M68: Archivo sin reservas, participó también Janine Otálora, la magistrada presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, quien destacó que el derecho al acceso a la información es, junto con los procesos electorales, el piso básico de cualquier democracia; así como la coordinadora de la Red por la Rendición de Cuentas, Lourdes Morales Canales.

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Asimismo, estuvieron presentes el coordinador de Difusión Cultural de la UNAM, Jorge Volpi, y el director del Centro Cultural Universitario Tlatelolco (CCUT), Ricardo Raphae

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