Después de la captura y ejecución de José María Morelos y Pavón la situación de los insurgentes era crítica: Hidalgo y los primeros caudillos habían desaparecido y sólo unas cuantas partidas capitaneadas por Guadalupe Victoria, José María Liceaga y Vicente Guerrero, continuaban la lucha en Veracruz, el Bajío y el Sur novohispano. Sumado a ello, el gobierno virreinal se fortaleció al ofrecer amnistía a los insurgentes que depusieran las armas. En ese contexto fue que el 15 de abril de 1817 desembarcó, en Soto la Marina, un joven guerrillero de origen navarro: Francisco Xavier Mina.

/cms/uploads/image/file/270209/Mina__Allende__Matamoros.jpg

Mina nació en julio de 1789 en Navarra, Pamplona. Con la entrada de tropas francesas a territorio español, a raíz del Tratado de Fontainebleau de octubre de 1807, Mina formó el cuerpo “Corso Terrestre de Navarra” para combatir a los franceses. Sus acciones guerrilleras le ganaron fama de buen estratega, no obstante fue hecho prisionero en marzo de 1809. En 1814, tras la derrota de Napoleón, recuperó su libertad.

/cms/uploads/image/file/270208/Mina01.jpg

Con el retorno de los Borbón al poder se reinstaló el absolutismo en España y se derogó la Constitución de 1812. Ante ello Mina conspiró contra la Corona española, exigiendo el restablecimiento de los principios gaditanos. Sus planes no tuvieron éxito y se exilió en Inglaterra. Durante su estancia en Londres, Mina conoció a fray Servando Teresa de Mier, quien le hizo comprender que las luchas independentistas de América eran parte del mismo proceso contra el absolutismo de Fernando VII.

/cms/uploads/image/file/270203/fernando_VII.jpg

Convencido de que en América podría continuar su lucha contra Fernando VII, Mina se embarcó, en mayo de 1816, hacia tierras americanas a bordo de la fragata Caledonia, acompañado de fray Servando y 22 oficiales españoles, italianos e ingleses. Antes de emprender su expedición a la Nueva España, Mina viajó a Haití en donde el general Alexandre Pétion le proporcionó ayuda, asimismo se reunió con Simón Bolívar.

/cms/uploads/image/file/270213/Bando_para_advertir_que_nadie_apoye_a_Francisco_Xavier_Mina.jpg

A bordo de los buques “Neptuno”, “Congreso Mexicano” y “Cleopatra”, Xavier Mina arribó a Soto la Marina, donde desembarcó el 15 de abril de 1817. A su llegada, refiere la investigadora Johanna von Grafenstein, Mina “imprimió y distribuyó una proclama, en la que dio a conocer los motivos de su lucha: poner fin al despotismo y monopolio ejercido en España por Fernando; privarlos de los recursos de las posesiones de ultramar; unir su lucha contra la tiranía con la de los americanos, así como ‘el establecimiento de gobiernos liberales en toda la extensión de la antigua monarquía”.

/cms/uploads/image/file/270212/Carta_de_Joaqu_n_Arias_Flores_sobre_la_entrada.jpg

En Soto la Marina, Mina mandó construir un fuerte en donde dejó 130 hombres al mando del mayor Sardá, mientras que él se adentró al país con unos 300 seguidores. El fuerte fue destruido por la fuerza naval imperial y Fray Servando Teresa fue capturado.

/cms/uploads/image/file/270211/Nueva_Espa_a_principios_de_s19.jpg

Francisco Xavier Mina se internó en la Nueva España con el objetivo de reunirse con los insurgentes para unir esfuerzos contra la monarquía; en su travesía se enfrentó a los realistas y obtuvo importantes victorias, entre ellas: en Valle del Maíz, en la hacienda de Peotillos, en Real de Pinos y en Rincón de Centeno, cerca de San Juan de los Llanos.

/cms/uploads/image/file/270202/Copia_del_diploma_y_las_dos_certificaciones_que_el_Virrey_Juan_Ru_z_de_Apodaca.jpg

En el Fuerte el Sombrero, Guanajuato, Mina se reunió con el reputado insurgente Pedro Moreno. A partir de ese momento la suerte del guerrillero navarro cambió. Al respecto, la historiadora Doralicia Carmona Dávila refiere que “Mina urgido de apoderarse de una ciudad importante que reviviera la insurgencia, atacó Guanajuato la noche del 24 de octubre; mas sus tropas fueron dispersadas por el enemigo. Al verse derrotados, Mina y Moreno huyeron al Rancho del Venadito, pero un cura de Silao los denunció y, el 27 de octubre, Mina y Moreno fueron detenidos. El primero fue encadenado, el segundo ejecutado inmediatamente”.

/cms/uploads/image/file/270201/Conde_de_Venadito.jpg

El 11 de noviembre de 1817, Mina fue conducido al Cerro del Bellaco y, frente al fuerte de los Remedios, fusilado por elementos del Batallón de Zaragoza. Por la captura, el virrey Apodaca recibió el título de conde del Venadito.

/cms/uploads/image/file/270204/Derrota_de_Mina.jpg

Xavier Mina, comenta Doralicia Carmona, fue reivindicado el 17 de septiembre de 1823, cuando su cuerpo fue enterrado solemnemente frente al altar mayor de la Catedral de México, junto con Hidalgo, Morelos y Allende, considerados “Padres de la Patria”. Desde el 15 de septiembre de 1910, sus restos descansan en la Columna de la Independencia.

¡Ven!, visita el Archivo General de la Nación, y consulta sus fondos documentales y la biblioteca Ignacio Cubas, donde podrás conocer y reconstruir la historia de nuestro país.