Objetivo general:
Asegurar la calidad, inclusión y equidad en el servicio educativo, como respuesta oportuna a los alumnos de educación básica en instituciones del Sector Salud, para mantener, continuar y alcanzar el logro académico establecido en los estándares curriculares, y así, elevar el nivel de eficiencia terminal.
Objetivos específicos:
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Dar continuidad al proceso de aprendizaje de los alumnos en condición hospitalaria a través de una modalidad escolarizada.
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Ofrecer la oportunidad de inscripción, reinscripción, acreditación y certificación de estudios a los alumnos en condición hospitalaria que se han visto en la necesidad de abandonar sus estudios, y/o no han tenido acceso al sistema educativo.
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Contribuir elevar los índices de permanencia y egreso.
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Potenciar el desarrollo de competencias para la vida, a través de la atención educativa centrada en los recursos del arte, el juego y el uso de nuevas tecnologías y el intercambio intercultural en grupos multigrado.
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Generar estrategias de intervención educativa, materiales de apoyo e instrumentos de seguimiento al desempeño, a partir de adecuaciones curriculares al contexto hospitalario, basadas en el Plan y Programas de Estudio de Educación Básica vigentes.
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Favorecer el desarrollo de competencias docentes hospitalarias, a través de programas de capacitación y acompañamiento.
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Propiciar ambientes de aprendizaje en áreas pediátricas de las instituciones de salud, a través de acuerdos de colaboración con el sector salud.
Antecedentes:
Otrora, en nuestro país, el servicio de educación básica en instituciones de salud se llevó a cabo a través de esfuerzos aislados provenientes de diversos sectores, social y privado principalmente. Al respecto, podemos citar el caso del Instituto Nacional de Cardiología Ignacio Chávez y del Hospital Infantil de México Federico Gómez que, en los años cuarenta y sesentas, respectivamente, albergaban una escuela al interior de sus instalaciones proporcionando el servicio a pacientes desde ese plantel.
Años más tarde, el ISSSTE a través del Voluntariado ANASVO desarrolla una tarea educativa similar con el Centro Unidos por la vida, que canaliza a pacientes pediátricos para su atención educativa con asesores e incluso becas que les permitían estudiar en bachilleratos abiertos. Esta idea inspira en el 2005 el surgimiento del Programa Sigamos Aprendiendo… en el hospital, desde el sector salud, como una iniciativa que ofrece oportunidades educativas a niños, niñas y jóvenes que viven con enfermedades crónicas.
Para constituir a Sigamos aprendiendo… en el hospital como un programa sostenible, se firman las Bases de Colaboración entre los sectores educación y salud impulsando la apertura de cinco aulas hospitalarias en la Ciudad de México, y posteriormente ampliar la cobertura de este servicio al interior de la República Mexicana, pero dichos esfuerzos no se habían traducido en grandes logros debido a la desarticulación y diversidad en la metodología empleada para la atención de la población pediátrica.
En 2007 después de realizar un estudio del contexto hospitalario -acerca de los rasgos de la población a atender y de los actores involucrados-, la Administración Federal de Servicios Educativos en el DF diseña un Programa que no sólo brinde atención a dicha población sino que contribuya a dar continuidad a sus estudios de nivel básico a través de una metodología especializada que tiene como base el Plan y Programas de Estudio para la Educación Básica, para que el alumno se reincorpore a su escuela de origen en su oportunidad; además, inicia con un plan de formación dirigido al equipo docente con el fin de que éste cuente con las competencias docentes necesarias para la intervención educativa en este contexto.
A esta labor conjunta entre el sector educación y el sector salud, se une en el 2010 el Instituto Mexicano del Seguro Social, en un trabajo colaborativo, con el afán de favorecer un ambiente de desarrollo integral del alumno que se encuentra en situación de hospital y continúe su educación básica reincorporándose a su centro escolar cuando sea posible.
Actualmente, se ha promovido la firma de Convenios de Colaboración entre la AFSEDF y diecinueve instituciones de salud para la operación de la Escuela de Innovación Pedagógica. Tu escuela en el hospital que, a la fecha, cuenta con treinta y dos aulas equipadas con recursos didácticos, bibliográficos y tecnológicos; así como con docentes calificados, contribuyendo a los procesos de aprendizaje de los alumnos que se encuentran internados o en tratamientos médicos prolongados.