México es centro de origen, diversidad y domesticación de al menos 59 razas nativas de maíz, originadas a través de la selección por los agricultores1, lo que representa, aproximadamente, el 20% de las razas registradas en América.

Sin embargo, a través del proyecto “huella genética de maíz”, financiado por la SAGARPA a través del SNICS, se ha sugerido que en México existen 62 razas. En el estudio se concluye que las razas mexicanas de maíz constituyen un reservorio genético de alto valor y un pilar fundamental hacia la seguridad alimentaria del país y del mundo. Así mismo, las razas se presentan como unidades definidas genética y geográficamente.

La selección y utilización del cultivo, está vinculado con el desarrollo cultural y social de los agricultores que han contribuido a su conservación y mejora. Esta labor es fundamental puesto que se obtiene diversidad genética, la base en la obtención de nuevas variedades2 tolerantes a diversos factores, como los efectos del calentamiento global y cambio climático; a plagas, enfermedades y otras condiciones adversas.

1. Sánchez G., J. J. y M. M. Goodman. 1992. Relationships among the Mexican races of maize. Economic Botany 46:72-85.

2. Castillo G., F. 1993. La variabilidad genética y el mejoramiento de los cultivos. Ciencia. Número especial: 69-79.