El día de ayer se publicó en el Diario Oficial de la Federación el Decreto por el que el Presidente de la República, Lic. Enrique Peña Nieto, aprueba el Programa Nacional de Financiamiento del Desarrollo 2013-2018 (PRONAFIDE).

El documento presenta un diagnóstico general del contexto económico, de las finanzas públicas y del sector financiero, así como 6 objetivos, 35 estrategias y 144 líneas de acción específicas que servirán de guía para la conducción de las políticas públicas del sector hacendario en el periodo 2013-2018. Asimismo, en seguimiento de lo dispuesto en el Plan Nacional de Desarrollo (PND) para un gobierno cercano y moderno, el PRONAFIDE presenta 11 indicadores para los cuales se establecen metas que se proponen alcanzar en 2018.

El PRONAFIDE detalla los principales elementos de la agenda de reformas estructurales y su impacto esperado en el crecimiento económico. Se enfatiza la importancia de la Regla de Balance Estructural Implícita para las finanzas públicas y se detallan algunos compromisos de gasto que se establecieron como parte de las adecuaciones recién aprobadas a la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria.

El Gobierno de la República refrenda su compromiso con la estabilidad macroeconómica como una política de Estado. Dicha estabilidad es producto de políticas fiscales, financieras y monetarias responsables y representa una plataforma sólida para impulsar la transformación necesaria que eleve el crecimiento potencial de México y que nos permitan mejorar la calidad de vida de la población.

El PRONAFIDE es un paso más de esta política pública, al garantizar la disponibilidad de los recursos fiscales y financieros necesarios para implementar la agenda de reformas y cumplir con lo establecido en el PND. Este esfuerzo, junto con los demás programas sectoriales y especiales previstos en el PND, contribuirá a que México alcance su máximo potencial y se logre el objetivo más importante de la política económica: el bienestar de las familias mexicanas.