- En un entorno global complejo y volátil, durante el segundo trimestre de 2015, la economía mexicana mantuvo un desempeño consistente con una aceleración del crecimiento durante el año. En un contexto global que presenta una apreciación generalizada del dólar frente a las demás monedas, el tipo de cambio se ajustó de manera ordenada contribuyendo a preservar la estabilidad de las variables internas: la inflación se encuentra en mínimos históricos, las tasas de interés y los precios de los activos financieros permanecen estables.
- Durante enero-junio de 2015, los ingresos del sector público aumentaron en 4.0 por ciento en términos reales con respecto al mismo periodo de 2014. Los ingresos no petroleros tuvieron un aumento de 23.4 por ciento. A su interior, destaca el incremento de la recaudación tributaria de 28.8 por ciento y de los ingresos no tributarios del Gobierno Federal de 54.0 por ciento. El buen comportamiento de los ingresos no petroleros permitió compensar la reducción de 38.3 por ciento de los ingresos petroleros observada en el mismo periodo.
- Con respecto al monto previsto en el programa anual, sin considerar los beneficios asociados a las coberturas del petróleo, los ingresos presupuestarios fueron mayores en 84 mil 498 millones de pesos durante el primer semestre de 2015. Este comportamiento no marca una tendencia para el resto de 2015 ni para ejercicios fiscales posteriores debido a que una parte relevante de estos recursos se generaron por circunstancias excepcionales como son: el entero de recursos del Banco de México derivado de su remanente de operación, así como efectos asociados a las disposiciones tributarias aprobadas por el H. Congreso de la Unión en 2013, entre otros.
- Durante junio pasado se realizó la aportación de los 31.4 mil millones de pesos del remanente de operación del Banco de México al Fondo de Inversión para Programas y Proyectos de Infraestructura del Gobierno Federal, los cuales se aplicarán a dicho propósito en 2016 de acuerdo con lo que determine el H. Congreso de la Unión. Esta aportación se registró como un gasto erogado en dicho mes de conformidad con las normas de contabilidad gubernamental vigentes.
- Derivado de dicha aportación, el gasto total del sector público presupuestario durante el mes de junio observó un crecimiento real de 3.4 por ciento. Sin considerar dicha operación extraordinaria, que representa una inversión para infraestructura en 2016, el gasto total del sector público presupuestario decreció 3.2 por ciento en términos reales con respecto al mismo mes del año anterior.
- Asimismo, ajustando por la operación del remanente del Banco de México, el gasto total del sector público presupuestario se incrementó en el segundo trimestre sólo 0.7 por ciento con respecto al mismo periodo del año anterior. Sin considerar dicha operación, el incremento real del gasto en el primer semestre del año fue de 6.0 por ciento.
- Destaca también la disminución de 1.2 por ciento en términos reales que presentan en conjunto los rubros de servicios personales y otros gastos de operación.
- Este comportamiento del gasto público es consistente con el ajuste preventivo de las finanzas públicas anunciado en enero y presenta una trayectoria decreciente a partir de los niveles iniciales observados a principio del año cuando se realizaron las aportaciones a los fondos de estabilización en una sola exhibición; mientras que en años anteriores se realizaban en el transcurso del ejercicio.
- En cuanto al gasto no programable, las participaciones federales a las entidades federativas y a los municipios correspondientes al primer semestre de 2015 aumentaron 2.5 por ciento en términos reales.
- Durante el primer semestre de 2015, se registró un déficit público de 345 mil 35 millones de pesos, resultado congruente con el déficit presupuestario anual aprobado por el H. Congreso de la Unión. Al excluir la inversión productiva, el balance presenta un déficit de 86 mil 993 millones de pesos.
- Los Requerimientos Financieros del Sector Público se ubicaron en 387 mil 848 millones de pesos. Asimismo, al cierre del primer semestre de 2015, la deuda del Sector Público Federal se mantuvo en niveles moderados y estables. El monto de la deuda neta del Sector Público se ubicó en 42.2 por ciento del PIB, en tanto que el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público ascendió a 44.9 por ciento del PIB. Dichos niveles son consistentes con los montos autorizados por el Congreso de la Unión y muestran el efecto de un calendario de colocación de deuda que permitió al Gobierno Federal aprovechar las condiciones favorables de mercado y concluir con la totalidad de las operaciones de deuda externa de 2015 al inicio del segundo trimestre.
I. Situación Económica
Los mercados financieros internacionales mantuvieron una elevada volatilidad, la cual estuvo relacionada, principalmente, con el proceso de normalización de la política monetaria en Estados Unidos, la crisis de la deuda en Grecia y el menor ritmo de crecimiento económico y volatilidad de los mercados accionarios en China. En los mercados cambiarios, el dólar estadounidense siguió fortaleciéndose frente a la casi totalidad de las monedas.
En este contexto, en México continuó registrándose un ajuste ordenado de los indicadores financieros. Por su parte, los resultados de los indicadores macroeconómicos disponibles indican que, durante el segundo trimestre de 2015, la economía mexicana mantuvo un desempeño consistente con una aceleración del crecimiento durante el año.
Producción
Durante el segundo trimestre de 2015, la economía mexicana mantuvo un desempeño mejor al de 2014 a pesar de que continuó observándose un entorno internacional complicado. Durante el bimestre abril-mayo de 2015 el Índice General de la Actividad Económica (IGAE) creció a una tasa anual de 1.8 por ciento, 0.7 puntos porcentuales más que la tasa reportada en el mismo periodo del año anterior. Esto implicó un aumento bimestral de 0.4 por ciento en cifras ajustadas por estacionalidad.
La economía de Estados Unidos tuvo una recuperación moderada después de la desaceleración que registró su PIB en el primer trimestre. Sin embargo, la producción industrial de ese país observó una segunda contracción trimestral consecutiva, situación que no ocurría desde el segundo trimestre de 2009. Lo anterior se explica, en cierta medida, por el efecto del fortalecimiento del dólar sobre la demanda de productos estadounidenses y por el impacto de los menores precios del petróleo sobre el gasto en perforación de pozos. Los pronósticos de crecimiento del PIB y la producción industrial para el año en su conjunto se revisaron nuevamente a la baja, aunque se anticipa un mayor dinamismo de la economía durante el segundo semestre de este año.
Debe señalarse que, lluvias extraordinarias en el estado de Texas, que afectaron la logística de la distribución de las mercancías importadas a través de dicha entidad durante mayo, se reflejaron en un menor dinamismo de las exportaciones no petroleras de México. No obstante, estas mostraron una recuperación durante junio.
Por su parte, los indicadores de la demanda interna en México apuntan a que tanto el consumo como la inversión siguieron recuperándose como consecuencia del crecimiento del empleo formal, el repunte en el crédito a empresas y hogares, la disminución de la tasa de desocupación y la reducción de la inflación a mínimos históricos. Así, en el segundo trimestre de 2015, el valor real de las ventas de los establecimientos afiliados a la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio y Departamentales (ANTAD) se incrementó a un ritmo anual de 6.4 por ciento, el mayor aumento desde el tercer trimestre de 2012.
Por otro lado, la producción de petróleo continuó a la baja. En el bimestre abril-mayo de 2015, la minería tuvo una disminución anual de 8.2 por ciento. La minería petrolera cayó a una tasa anual de 9.8 por ciento (la mayor reducción desde el bimestre octubrenoviembre de 1995), mientras que el resto de la actividad extractiva se redujo en 1.8 por ciento.
Empleo
Durante el segundo trimestre de 2015, la generación de empleos formales continuó aumentando a un ritmo elevado. Al 30 de junio de 2015, el número de trabajadores afiliados al IMSS ascendió a 17.7 millones de personas, nivel que implicó un crecimiento anual de 746 mil plazas (4.4 por ciento). Por tipo de contrato, la afiliación permanente se incrementó en 588 mil trabajadores y la eventual lo hizo en 158 mil personas.
Precios
Durante el segundo trimestre de 2015, la inflación general anual mostró una tendencia decreciente al ubicarse en niveles inferiores al 3 por ciento. Esta trayectoria se atribuyó, de forma significativa, a las reducciones en los precios de los energéticos y de los servicios de telecomunicaciones. Asimismo, el traspaso de la depreciación de la moneda nacional a los precios ha estado en línea con lo previsto y no ha dado lugar a efectos de segundo orden en el índice.
El Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) cerró el trimestre en 45,053.7 unidades, lo cual representó un crecimiento de 3 por ciento frente al cierre del primer trimestre de 2015.
Por su parte, el tipo de cambio del peso continuó depreciándose frente al dólar como resultado de un fortalecimiento generalizado del dólar contra casi la totalidad de las monedas, derivado de la expectativa de normalización de la política monetaria en Estados Unidos, de la divergencia de la política monetaria entre economías avanzadas, la incertidumbre generada respecto a la crisis de deuda en Grecia y de la reciente caída del mercado accionario chino. En este contexto, al cierre de junio el tipo de cambio se ubicó en 15.70 pesos por dólar, lo que implicó una depreciación de 2.8 por ciento respecto al nivel reportado al cierre de marzo (15.26 pesos por dólar).
Crédito
Durante el segundo trimestre de 2015 la mayor competencia inducida por la Reforma Financiera, así como el fortalecimiento de la demanda interna, se reflejó en una aceleración del crédito a las empresas y los hogares respecto a lo observado en 2014. En mayo de 2015, la cartera de crédito total vigente de la banca comercial y de desarrollo aumentó 11.1 por ciento en términos reales anuales, el mayor crecimiento desde junio de 2012. A su interior, el crédito vigente al sector privado registró un incremento a tasa real anual de 8.9 por ciento. Dentro de este último indicador, en mayo sus tres componentes registraron mayores crecimientos que los del cierre de 2014: a empresas y personas físicas aumentó 11.6 por ciento (la mayor tasa desde junio de 2012), a la vivienda se expandió 6.7 por ciento (el mayor ritmo desde octubre de 2011) y al consumo se incrementó 3.8 por ciento (la tasa más elevada desde junio de 2014).
II. Finanzas Públicas
Durante el primer semestre de 2015, se registró un déficit público de 345 mil 35 millones de pesos y un déficit primario de 130 mil 302 millones de pesos, resultados congruentes con el monto anual aprobado por el H. Congreso de la Unión. Al excluir la inversión productiva, se tiene un déficit de 86 mil 993 millones de pesos. Por su parte, los Requerimientos Financieros del Sector Público se ubicaron en 387 mil 848 millones de pesos.
Ingresos
Al primer semestre de 2015, los ingresos presupuestarios del sector público se ubicaron en 2 billones 48 mil 549 millones de pesos, monto superior en 4.0 por ciento anual en términos reales respecto al mismo periodo de 2014. La evolución de los principales rubros de ingreso fue la siguiente:
- Los ingresos tributarios no petroleros ascendieron a 1 billón 225 mil 875 millones de pesos al incrementarse 28.8 por ciento en términos reales con respecto a 2014. Resaltan los crecimientos anuales en la recaudación del sistema renta, del IEPS y del impuesto a las importaciones, de 24.1, 326.5 y 24.2 por ciento en términos reales, respectivamente. Estos resultados se explican, en parte, por el efecto de las disposiciones tributarias establecidas en 2014, como la eliminación del régimen de consolidación en el ISR, así como de las medidas administrativas en el proceso de retención del ISR a los empleados públicos adoptadas este año. Por tanto, una proporción de esos recursos son de naturaleza no recurrente.
- Los ingresos no tributarios del Gobierno Federal sumaron 140 mil 355 millones de pesos e incluyen los aprovechamientos derivados del remanente de operación del Banco de México por 31 mil 449 millones de pesos. Así, el crecimiento respecto al primer semestre de 2014 de este agregado asciende a 54.0 por ciento.
- Los ingresos propios de los organismos y empresas distintas de Pemex se ubicaron en 300 mil 439 millones de pesos, lo que significa una reducción de 2.3 por ciento en términos reales respecto a 2014 como reflejo de la disminución en las tarifas eléctricas.
- Por su parte, los ingresos petroleros se ubicaron en 381 mil 880 millones de pesos, monto inferior en 38.3 por ciento anual en términos reales a los recibidos en el primer semestre de 2014. Este resultado refleja la reducción del precio del petróleo y del gas natural (47.5 y 33.8 por ciento, en ese orden), así como la menor producción de petróleo (8.5 por ciento). Estos efectos se compensaron parcialmente con el efecto de la depreciación del tipo de cambio. Cabe señalar que estos ingresos no incluyen los beneficios de las coberturas que se recibirá en diciembre de este año.
En particular, destaca la recaudación tributaria, que en el primer semestre del año fue superior en 229 mil 418 millones de pesos al monto programado. Como ya se mencionó, una parte importante de estos ingresos son de naturaleza no recurrente.
También debe señalarse el comportamiento de otros ingresos extraordinarios, como el entero de recursos al Gobierno Federal que realizó el Banco de México por su remanente de operación del ejercicio fiscal 2014, y el pago por la concesión para crear una cadena de televisión con cobertura nacional.
Como se observa, una parte importante de los recursos excedentes observados en el primer semestre se generaron por circunstancias excepcionales que no marcan una tendencia para el resto de 2015 ni para ejercicios fiscales posteriores.
En contraste, los ingresos petroleros del sector público muestran un monto inferior en 212 mil 265 millones de pesos con respecto a lo programado.
Finalmente, la suma de los saldos de los fondos de estabilización e inversión, al cierre de junio de 2015, es de 124 mil 535 millones de pesos, incluyendo el aprovechamiento por el remanente de operación de Banco de México cuyo tratamiento específico se detalla en la siguiente sección.
Gasto
En el mes de junio pasado, se registró la aportación de los 31.4 mil millones de pesos del remanente de operación del Banco de México al Fondo de Inversión para Programas y Proyectos de Infraestructura del Gobierno Federal, los cuales se aplicarán a dicho propósito en 2016 de acuerdo con lo que determine el H. Congreso de la Unión.
Sin tomar en consideración dicha aportación el crecimiento real del gasto total del sector público sería de 6.0 por ciento en lugar de 7.4 por ciento incluyendo la aportación.
Durante el segundo trimestre, el crecimiento sería de 0.67 por ciento en lugar de 3.35 por ciento, comparándolo contra el mismo trimestre del año anterior. Asimismo, destaca que el crecimiento de junio respecto al mismo mes del año anterior, sin considerar la aportación antes mencionada, representa una disminución de 3.2 por ciento en lugar de un aumento de 3.4 por ciento. Durante el primer semestre de 2015, el gasto neto presupuestario del sector público ascendió a 2 billones 398 mil 723 millones de pesos.
El gasto programable se ubicó en 1 billón 846 mil 785 millones de pesos, nivel superior en 7.4 por ciento real respecto a 2014 y en 5.5 por ciento si se ajusta por la aportación asociada al remanente de operación del Banco de México. A su interior, se observa lo siguiente:
- Los recursos destinados al pago de subsidios y a pensiones registraron incrementos reales de 12.9 y 6.9 por ciento, respectivamente. Los subsidios incluyen los programas sociales para la población más vulnerable. Las erogaciones destinadas a actividades de desarrollo social y económico aumentaron 4.9 por ciento en términos reales, en ambos casos.
- La inversión física presupuestaria aumentó 0.4 por ciento en términos reales. En contraste, se registró una disminución en los rubros de servicios personales y otros gastos de operación a una tasa real anual de 1.2 por ciento en conjunto.
- Este comportamiento está en línea con las medidas adoptadas por el Gobierno de la República para llevar a cabo un ajuste preventivo del gasto en 2015. En particular, el gasto ejercido por los ramos administrativos al primer semestre del año muestra un crecimiento real de 11.3 por ciento, que representa una reducción en comparación con el crecimiento observado en los primeros tres meses del año, que fue de 29.5 por ciento real.
- El gasto ejercido por los entes autónomos registró un incremento real de 27.7 por ciento respecto al primer semestre de 2014 que responde, en parte a los gastos asociados al reciente proceso electoral y el arranque de funciones de los Institutos. Destacan, por su contribución al agregado de ramos autónomos, los incrementos en el Instituto Nacional Electoral, 118.5 por ciento; el Poder Legislativo, 7.9 por ciento, y el Poder Judicial, 8.0 por ciento. En el periodo enero-junio, los recursos canalizados a las entidades federativas y municipios a través de participaciones, aportaciones y otras transferencias aumentaron 1.9 por ciento real. En particular, las participaciones federales muestran un crecimiento real de 2.5 por ciento con respecto al primer semestre de 2014.
El uso responsable y prudente del endeudamiento público es una premisa fundamental en la presente administración. Esto se ve reflejado en los objetivos, estrategias y líneas de acción establecidos tanto en el Plan Nacional de Desarrollo (PND) como en el Programa Nacional de Financiamiento del Desarrollo (PRONAFIDE). En congruencia con lo anterior las acciones en materia de manejo de la deuda pública durante este año se han dirigido a: i) cubrir las necesidades de financiamiento del Gobierno Federal con bajos costos en un horizonte de largo plazo, con un bajo nivel de riesgo y considerando posibles escenarios extremos; ii) preservar la diversidad del acceso al crédito en diferentes mercados; y, iii) promover el desarrollo de mercados líquidos y profundos con curvas de rendimiento que faciliten el acceso al financiamiento a una amplia gama de agentes económicos públicos y privados.
Deuda interna
La política de deuda busca financiar la mayor parte de las necesidades de financiamiento del Gobierno Federal en el mercado interno, en este sentido las acciones realizadas en el mercado doméstico de deuda han estado orientadas a procurar en todo momento su buen funcionamiento. De esta forma el programa de colocación de valores durante el trimestre ha sido congruente con los objetivos y líneas de acción establecidas en el Plan Anual de Financiamiento. Junto a lo anterior, durante el segundo trimestre del presente año destacó la operación de permuta de bonos realizada en el mes de junio a través de la cual se intercambiaron bonos con vencimiento en el corto plazo por bonos con vencimiento en el mediano y largo plazo con lo cual se mejora el perfil de vencimientos de la deuda y se reduce el riesgo de refinanciamiento.
Deuda externa
Una de las fortalezas de la política de crédito público es el buen acceso que se mantiene a los mercados internacionales de capital. En este aspecto resulta importante la emisión que el Gobierno Federal realizó en el mes de abril de un nuevo bono de referencia en euros a 100 años, por un total de 1 mil 500 millones de euros, aproximadamente 1 mil 620 millones de dólares a la fecha de colocación. Esta fue la primera emisión soberana en el mercado en euros a 100 años.
Finalmente, es importante destacar que las condiciones de costo y plazo obtenidas en esta operación realizada en los mercados internacionales representaron el financiamiento de menor costo obtenido por el Gobierno Federal en sus cuatro emisiones al plazo de 100 años, lo cual refleja la amplia aceptación de los instrumentos de deuda emitidos por el Gobierno Federal y la confianza de los inversionistas internacionales en el manejo de las finanzas públicas y en las perspectivas de crecimiento del país.
Deuda neta del Gobierno Federal
Al cierre del segundo trimestre de 2015, el saldo de la deuda neta del Gobierno Federal se ubicó en 5 billones 816 mil 537.5 millones de pesos. Como porcentaje del PIB, representó el 32.7 por ciento. La estructura del portafolio actual de la deuda del Gobierno Federal mantiene la mayor parte de sus pasivos denominados en moneda nacional, representando al 30 de junio de 2015 el 78.3 por ciento del saldo de la deuda neta del Gobierno Federal.
El saldo de la deuda interna neta del Gobierno Federal al cierre del segundo trimestre de 2015 ascendió a 4 billones 554 mil 481.5 millones de pesos, monto superior en 230 mil 360.9 millones de pesos al observado en el cierre de 2014. Como porcentaje del PIB, este saldo representa 25.6 por ciento.
Al cierre del segundo trimestre de 2015, el saldo de la deuda externa neta del Gobierno Federal ascendió a 81 mil 69.4 millones de dólares, monto superior en 3 mil 717 millones de dólares al registrado en el cierre de 2014. Como porcentaje del PIB, este saldo representa 7.1 por ciento.
Deuda neta del Sector Público Federal
Al cierre del segundo trimestre de 2015, el monto de la deuda neta del Sector Público Federal se situó en 7 billones 503 mil 117.2 millones de pesos, que incluye la deuda neta del Gobierno Federal, la de las Empresas Productivas del Estado y la de la Banca de Desarrollo. Como porcentaje del PIB, significó 42.2 por ciento. La deuda interna como porcentaje del PIB representó 28.3 por ciento. En lo que se refiere a la deuda externa neta a PIB, ésta se situó en 13.9 por ciento.
Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público
Al cierre del segundo trimestre de 2015, el Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP), indicador que incluye las obligaciones del sector público en su versión más amplia, ascendió a 7 billones 978 mil 689 millones de pesos, equivalente a 44.9 por ciento del PIB, monto superior en 3.3 puntos porcentuales al observado al cierre de 2014. La evolución de dicho saldo en el segundo trimestre del año estuvo determinada, entre otros factores, por la dinámica de ingreso-gasto y por una revaluación del saldo de la deuda externa asociado a la depreciación del tipo de cambio. Por lo tanto, una vez eliminados los efectos de calendario, hacia el cierre del año la evolución de este indicador será consistente con las metas de déficit y de SHRFSP para 2015.