La Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) define a la violencia contra las mujeres como “Todo acto de violencia de género que resulte, o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada”. El 17 de diciembre de 1999 la ONU declaró el 25 de noviembre como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, con el objetivo de invitar a los gobiernos, las organizaciones internacionales y las no gubernamentales a que lleven a cabo en ese día actividades dirigidas a sensibilizar a la opinión pública con respecto al problema de la violencia contra la mujer.

El Programa Especial de Migración (PEM) contempla comunicar y sensibilizar a la sociedad sobre esta problemática, propone desarrollar esquemas de atención especializada y promueve la salud integral de las víctimas a través estas líneas de acción:

  • Desarrollar y difundir campañas de prevención de la violencia contra mujeres migrantes
  • Instrumentar estrategias intersectoriales para la atención y protección de mujeres y niñas migrantes víctimas de tráfico, trata, abuso sexual y secuestro
  • Asegurar la atención médica a mujeres migrantes víctimas de violencia sexual y a migrantes embarazadas durante su tránsito por México

La violencia contra la mujer:

  • Se puede evitar. La prevención es posible y esencial
  • Es una violación a los derechos humanos
  • Es consecuencia de la discriminación que sufre, tanto en las leyes como en la práctica, y la persistencia de desigualdades por razón de género
  • Daña e impide el avance en muchas áreas como la erradicación de la pobreza, la lucha contra el VIH/SIDA, la paz y la seguridad
  • Es una pandemia global: hasta 70% de las mujeres sufre violencia en su vida, según la ONU