Lomas de Sotelo, D.F., a 17 de diciembre de 2009.- Soldados del Ejército Mexicano pertenecientes a la 7/a. Zona Militar (Escobedo, N.L.), el 17 de diciembre de 2009 repelieron una agresión de seis narcotraficantes, quienes perdieron la vida en el municipio de General Zuazua, N.L. 

El personal militar se encontraba realizando actividades de patrullaje aplicando la campaña permanente contra el narcotráfico a las 2235 horas del 17 de diciembre, sobre una brecha ubicada en el Rancho “El Huizachal” y de la granja porcina “Los Caballos”, del citado municipio. Al arribar al lugar de referencia se percataron de la existencia de tres vehículos estacionados en forma sospechosa y que en su interior se encontraban varios sujetos. 

Adoptando los procedimientos de actuación, los elementos del Ejército Mexicano procedieron a identificarse a viva voz, gritándoles que descendieran de los vehículos a efecto de realizar una revisión de rutina. 

Los civiles por el contrario, agredieron al personal militar con armas de fuego y encendieron los motores de los vehículos para tratar de darse a la fuga; ante esta situación los efectivos castrenses repelieron la agresión con su armamento de cargo. 

En el lugar de los hechos se localizaron 73 paquetes de diferentes tamaños de marihuana con un peso aproximado de 616.400 kilogramos (seiscientos dieciséis kilos y cuatrocientos gramos), 2 armas largas, 4 armas cortas, 6 cargadores para diferentes armas, 58 cartuchos de diferentes calibres, 3 vehículos (una patrulla de tránsito del municipio de General Zuazua, N.L.) y diverso equipo de comunicación. 

Cabe hacer mención que de las personas que perdieron la vida, una de ellas coincide con las características físicas de diversas denuncias anónimas y que era catalogado como jefe de las plazas de los municipios de Marín, General Zuazua, Pesquería, Ciénaga de Flores e Higueras, N.L., conocido como (a) “EL COREANO”. 

Asimismo, dos de los cuerpos fueron identificados como policías del Municipio General Zuazua, con los nombres de JAVIER ISRAEL CASTILLO RIVERA y LUIS ALBERTO RODRÍGUEZ DE LEÓN, quienes al momento de la agresión estaban brindando protección a los delincuentes. 

Existen tres cuerpos de los agresores que aun no han sido identificados. 

Los cuerpos, enervante, armamento, vehículos y otros artículos, fueron puestos a disposición de las autoridades correspondientes.