Licenciado MARIANO GONZÁLEZ ZARUR, Gobernador del Estado de Tlaxcala.
Diputado TULIO LARIOS AGUILAR, Presidente de la mesa directiva de la sexagésima legislatura.
Licenciado JOSÉ AMADO JUSTINO HERNÁNDEZ HERNÁNDEZ, Magistrado Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado.
Distinguidas damas diputadas y señores diputados.
Apreciables Presidentes Municipales.
Respetables autoridades federales, estatales y municipales.
Invitados especiales.
Representantes de los medios de comunicación.
Señoras y señores.
Apreciados compañeros de armas.
 
Muy buenas tardes a todos.
 
Es una gran distinción encontrarme ante esta soberanía para agradecer en nombre de las mujeres y hombres del ejército, su ejército, el ejército de todos, el gesto que nos otorga la sociedad aquí representada, el honorable congreso y gobierno del Estado de Tlaxcala, al inscribir en el muro de honor de este recinto la frase: 
 
1913-2013, “CENTENARIO DEL EJÉRCITO MEXICANO”, LEALTAD Y PATRIOTISMO POR MÉXICO.
Inscripción que hace recordar nuestro origen y el destino constitucionalista, y confirmar que a lo largo de esta primera centuria, la lealtad y el patriotismo han evolucionado en el espíritu colectivo de las fuerzas armadas, hasta transformarse en sólidos basamentos de su actuar cotidiano.
 
Estos grandes baluartes nos comprometen con los más elevados intereses de la patria, y con las misiones que tenemos asignadas en el marco legal vigente; su ejercicio diario y permanente generan que México confíe en sus fuerzas armadas, ¡que la sociedad confíe en nosotros!, confianza que demuestra el aprecio e identificación del pueblo de Tlaxcala hacia sus soldados y que se refleja en el espíritu de la sesión solemne que hoy aquí nos reúne. 
 
En correspondencia, quienes portamos el uniforme de la república, refrendamos nuestro deber de respaldar toda acción institucional, con lealtad, honor y compromiso por el país, por la sociedad tlaxcalteca.
 
Esta entidad es grande por su cultura, sus tradiciones, su legado colonial, su historia y sobre todo por la calidez y hospitalidad de su gente.
 
También debo decir, que por sus sobresalientes acontecimientos en el devenir histórico se identifica ante los mexicanos como “cuna de la nación”; propiciando que sea tierra fértil en personalidades que han aportado mucho a nuestra patria; menciono solamente algunos que se encuentran en el muro de honor de este recinto:
 
ANDRÉS ANGULO; pablo Xelhuantzi; EZEQUIEL M. GRACIA; y hago mención especial del Teniente Coronel FELIPE SANTIAGO XICOTÉNCATL, quien llevó su amor a México hasta el sacrificio; pereciendo sublime y heroicamente en la Defensa de la República, en la épica jornada del 13 de septiembre de 1847; su nombre y restos yacen en el altar de la patria, a la par de los niños Héroes del Colegio Militar.
 
Hoy, impulsados por la grandeza de su historia, con el orgullo de su cultura y tradiciones, la sociedad y el Gobierno de Tlaxcala, con dedicación y entrega han hecho de esta entidad una de las más seguras y atractivas de México.
 
Grande, también es la riqueza humana y geográfica de esta tierra prodigiosa; el ánimo, la tenacidad, determinación y espíritu propositivo de su gente, enriquecen los valores y virtudes que conforman el diario quehacer de los Ciudadanos de Tlaxcala.
 
Todos estos rasgos del estado, exaltan el reconocimiento que hoy se nos otorga, en este año de la lealtad institucional y centenario del Ejército mexicano.
 
Este invaluable acto nos motiva y compromete a mantener el paso firme y decidido en nuestro quehacer castrense, en el esfuerzo integral de la nación para coadyuvar a lograr un México en paz, incluyente, próspero, con educación de calidad y con responsabilidad global; metas nacionales estas, que son la guía e inspiración de servicio de nuestro comandante supremo, el ciudadano enrique peña nieto, presidente de la república, para liberar el verdadero potencial de México.
 
Para el logro de este elevado propósito, las fuerzas armadas de tierra, mar y aire, continuamos cumpliendo nuestro deber a lo largo y ancho del territorio nacional, colocando el bienestar y seguridad de los ciudadanos en el centro de nuestro accionar.
 
Bajo este axioma, los soldados se esfuerzan todos los días, en todos los rincones del país, para proteger el valor más preciado de la nación, su gente; seguiremos en esta tarea, durante el tiempo que seamos requeridos, el tiempo que la sociedad lo demande.
 
¡Esa es nuestra misión y en su cumplimiento no bajaremos la guardia!; la asumimos con responsabilidad y entrega, cumpliendo la ley y respetando los derechos fundamentales de las personas.
Amable concurrencia:
 
Los integrantes de la fuerza armada de tierra, reiteramos a la sexagésima legislatura del congreso estatal, nuestro más elevado reconocimiento por la voluntad de enaltecer los primeros 100 años de vida institucional de su ejército; la leyenda aquí inscrita, es vínculo que nutre, fortalece y pertrecha la relación civil-militar; aquilatamos este gesto, por considerarlo justo reconocimiento a las mujeres y hombres valientes que en esta primera centuria, portando el uniforme de la república, han ofrendado sus vidas, o padecido lesiones severas en aras de la patria.
 
Esta singular deferencia, será compartida con los militares que día a día, cumplen con las misiones que se nos asignan; los soldados, continuaremos sirviendo siempre  a los intereses de la patria, tenemos como premisa la tranquilidad de la sociedad.
 
¡Esa ha sido y seguirá siendo la razón fundamental de nuestro actuar!.
 
El momento, es propicio para refrendar ante esta soberanía, el compromiso con el pueblo de México y con la sociedad tlaxcalteca; con certeza expreso: siempre habrá un soldado dispuesto a acudir a su llamado, dispuesto a darlo todo por ustedes; con esa misma mística de servicio; con el esfuerzo, el valor y la determinación de todos; sociedad, gobiernos y fuerzas armadas, podremos trazar el rumbo hacia el México que queremos: juntos, sumemos esfuerzos para enfrentar toda adversidad que atente contra la seguridad y desarrollo del país.
 
¡Esa es la única acción que nos permitirá lograr el México en paz que habremos de legar a las futuras generaciones!
¡Esa es la fórmula que da resultados para superar dificultades, para encarar con determinación a quienes atentan contra la calma y patrimonio de nuestros conciudadanos!
¡Esa, es la fórmula para seguir generando mejores oportunidades, para seguir construyendo un estado eficaz y una mejor patria!
 
Señoras y señores:
 
México vive un momento histórico trascendental, al encauzar su proceso de transformación para llevar al país a su máximo potencial.
 
Los soldados de la república aceptamos este reto y asumimos nuestra responsabilidad para cumplir con los legados históricos de quienes nos antecedieron. Su ejército cuenta con los mejores soldados para lograr este cometido; muchos de ellos orgullosamente tlaxcaltecas; mujeres y hombres que se adiestran y capacitan para ser mejores y que se suman decididos al esfuerzo productivo nacional. 
 
Ante la oportunidad histórica de escribir un mejor futuro para todo México, avancemos con unidad de propósitos y acción conjunta para cumplir nuestros más elevados anhelos.
 
¡Sumemos voluntades y recursos para brindarles una mejor patria a los mexicanos de hoy y de mañana!
 
¡Participemos activamente a favor de la construcción de un México y de un Tlaxcala, que avanzan con paso firme y seguro por el sendero de la paz, la estabilidad, la libertad y la justicia!
 
Muchas gracias por su atención.