DIRECCIÓN GENERAL DE COMUNICACIÓN SOCIAL

México, D.F., 25 de marzo de 2014.

 

Buenos días tengan todos ustedes. Gracias por acompañarnos en este arranque, pues es realmente arranque, porque en la Ciudad de México, con esta convocatoria, realmente vamos a tener muchísima más presencia formalmente ProMéxico Global inició en la ciudad de Mérida, Yucatán, y a partir de esta presentación estaré yendo a cuatro más, cinco más entidades federativas en la República Mexicana, para poder llegar a todos los actores que participan en la internacionalización de la economía mexicana.

Agradezco fundamentalmente la presencia de los gobernadores que me antecedieron el uso de la palabra: Carlos Lozano, Francisco Olvera, dos gobernadores que han estado muy activos en el proyecto de la internacionalización de la economía mexicana.

Francisco González, líder de este proyecto, director de ProMéxico, gracias por el esfuerzo y por el empeño para sacar adelante la reestructuración y la nueva imagen de México en el exterior.

Hoy nos reunimos un gran grupo de aliados. Están los señores embajadores que representan naciones con las cuales tenemos una gran actividad en todos los terrenos de cooperación, pero fundamentalmente en el área económica. Están los empresarios, que activamente buscan la internacionalización de la economía mexicana. Están, sin duda, los funcionarios públicos quienes están mayormente conectados con este gran esfuerzo. Nos acompañan el director de Bancomext, Enrique de la Madrid, gracias, Enrique, por estar aquí. Nos acompaña el director general de Aduanas, Alejandro Chacón, quien con su trabajo y colaboración nos ayuda a facilitar el proceso de integración global. Gracias, Alejandro, por acompañarnos. Nos acompaña también Adolfo López Negrete, quien representa al Consejo de Promoción Turística de México, un aliado fundamental en el rescate de la imagen de México en el extranjero. Y nos acompañas, sin duda, todos los colaboradores de ProMéxico, de la Secretaría de Economía, que están directamente involucrados en este terreno, así como muchas agencias gubernamentales en este proyecto.

Yo creo que el esfuerzo de posicionar la imagen económica de México en el extranjero, es un esfuerzo de todos. Por una parte, no hay mejor embajador del nuevo esfuerzo que aquel empresario extranjero que con inversión extranjera directa ha logrado establecer una historia de éxito en México.

La credibilidad en su testimonio cuando sale a foros internacionales tiene mil veces más impacto que la credibilidad de un funcionario público. Por eso, en este tipo de presentaciones y cuando vamos a promover a México en el extranjero, agradecemos siempre la participación de los empresarios que están invirtiendo en México y cómo su historia y talento pueden atraer el interés de mayores inversionistas extranjeros.

Los embajadores acreditados en México, sin duda, son los voceros de primera instancia en esta gran alianza por posicionar a México. Son quienes con su experiencia, su visión y sus contactos difunden una verdadera imagen equilibrada del país en el extranjero.

Creo que el señor Presidente de la República atinadamente en su discurso y en su presencia internacional que ha sido muy activa en su primer año de gobierno, está demostrando que es posible cambiar el discurso no para ocultar los problemas de un país, sino para posicionarnos de una manera realista y balanceada.

México es mucho más grande que sus problemas y presenta una oportunidad real para atraer el interés del mundo como está ocurriendo hoy gracias al proceso de transformación que vive el país en estos momentos.

Así es que agradezco a todos los aliados, a los embajadores, a los empresarios, a los funcionarios públicos que integramos este gabinete de imagen de México en el extranjero, a todos los que con su trabajo hacen que México se reposicione en el contexto internacional.

Cuando Carlos Lozano como gobernador y Francisco Olvera participan su experiencia en este esfuerzo, yo creo que es claro que este trabajo no sólo depende del orden del gobierno federal. Hoy, las entidades de la República salen con una agenda muy activa internacionalmente a promover las ventajas de sus regiones, de sus estados en el mundo internacional. Es, simplemente basta ver las agendas del Gobernador Olvera lo han llevado a Alemania, ustedes se imaginarán por qué está dentro de los finalistas para ver si BMW toma finalmente la decisión, y el Gobernador Lozano acaba de regresar de China, de un viaje muy exitoso, donde realmente lo ha hecho con frecuencia, va una vez al año a Asia, con muy buenos resultados dentro de su trabajo de promoción.

Cuando él saludaba a los secretarios de Desarrollo Económico de los estados y decía que fue 24 años Secretario de Desarrollo, le comentaba yo al Gobernador Olvera que ha de ser una pesadilla ser su Secretario de Desarrollo Económico; realmente lo compadezco, porque teniendo un jefe que ha sido 24 años Secretario de Desarrollo Económico, se ha de meter en todo y ha de opinar totalmente en cada una de las acciones que el Secretario toma dentro de su estrategia, que por cierto, ¿adivinen de dónde se lo pirateó? De ProMéxico. Estaba justamente en ProMéxico Japón cuando Carlos decidió invitarlo, y estamos muy, muy contentos de que los gobernadores reconozcan el talento que ProMéxico ha formado a través del tiempo.

Antes de entrar en el tema central, que es la integración de México, internacional, económica. Quisiera simplemente compartir con ustedes algo fundamental, y en esto traigo el mensaje del señor Presidente para el director general de ProMéxico, en el sentido de que ese primer gran esfuerzo de seguir las mejores prácticas internacionales, y de, a través de un proceso de coordinación, pero de identificación concreta de funciones, la labor de promoción de México en el extranjero se toma la decisión de coordinarla o mantenerla en líneas paralelas con Bancomext. Y se hace de una manera inteligente. Hoy ProMéxico cuenta con el talento de muchos promotores que se formaron en las filas de Bancomext a través de mucho tiempo.

Pero la creación del Fideicomiso ProMéxico tiene que llegar a una siguiente etapa de consolidación, y en este sentido transmito al señor director general el mensaje del Presidente de que trabajemos en un marco legal que formalice el establecimiento de un Fideicomiso que lo fortalezca y que le dé los parámetros y marcos legales necesarios, aprobados por el Legislativo, para poderle dar permanencia y definición futura a la institución, así es que tiene usted, señor director, el mandato del Presidente de la República para que le presentemos a la brevedad un proyecto para formalizar y definir legalmente las responsabilidades y las actividades de ProMéxico dentro de un marco legal respectivo.

Ahora, cuando hablamos de la política de internacionalización de México y específicamente de la integración comercial de la economía mexicana, tenemos que fundamentalmente ser muy claros que los Tratados Internacionales son las carreteras, son las vías por así hacerlo en una analogía, donde debe de transitar el esfuerzo justamente de la promoción para explotar lo que a través de las negociaciones se logra en la integración global.

Cuando analizamos el proceso histórico de la política de comercio exterior mexicana, tenemos que iniciar primero reconociendo que hay muy pocas políticas que han logrado consolidarse en algunos casos como políticas de Estado, o como políticas de gran sustentabilidad y credibilidad internacional. Yo diría que una política de Estado consolidada es aquella que pasa por la prueba de fuego del debate legislativo y de las diferentes fuerzas políticas, y en ello yo creo que es muy fácil como mexicano reconocer que hemos podido consolidar una política de Estado en materia de estabilidad económica.

Aquí hay varios que hemos sido diputados, incluyendo el Gobernador Olvera, Enrique de la Madrid, en donde varias legislaturas desde los noventas podemos ser testigos de que ya no hay debate sobre el tamaño del déficit público o la autonomía de la política monetaria de México. Eso sin duda, gana credibilidad y reduce el riesgo para los inversionistas tanto nacionales como extranjeros, y sin duda se logra consolidar a través de un debate constructivo que nunca pone en riesgo los elementos fundamentales de la estabilidad.

En ese mismo sentido, pero no con tan gran contundencia, la política de comercio exterior ha podido consolidarse a través de la transición gubernamental, con partidos de los diferentes signos políticos al frente del Ejecutivo federal hemos podido lograr consolidar una política de comercio exterior estable. Iniciamos sin duda en los ochentas con la incorporación al GATT, hace casi 30 años y a partir de ahí llegamos al siguiente gran parteaguas de la política de comercio exterior fundamentalmente la firma del Tratado del Libre Comercio en América del Norte.

Es increíble que hace 20 años logramos realmente romper rigideces, barreras, dudas, sobre como una economía en desarrollo podía integrarse globalmente a dos economías plenamente desarrolladas, y logramos no sólo convencer a los incrédulos, pero también con la evidencia a 20 años de distancia demostrar que el éxito de la integración de América del Norte ha sido contundente simplemente con observar las cifras que nos compartió Francisco. Hemos multiplicado por siete el nivel de exportaciones mexicanas. Hoy, México exporta el 60 por ciento de las manufacturas de América Latina, y sin duda también podemos sentirnos muy, muy orgullosos de que hemos transformado la esencia de la economía mexicana.

Hace 20 años o hace 22 años, México exportaba 67 por ciento de productos petroleros y mineros, escasamente llegaba a un 33 por ciento de productos manufactureros. Hoy eso se ha invertido, hoy las exportaciones manufactureras de México llegan a más del 80 por ciento de la economía nacional y las exportaciones energéticas y minerales constituyen no más del 15 por ciento de lo que exportamos en el mundo.

Esa transformación es gracias fundamentalmente a una redefinición en la política de comercio exterior. Decía yo que a pesar de la transición política en el gobierno federal logramos mantener la adherencia al libre comercio y la credibilidad en el mismo. A partir de NAFTA firmamos 10 tratados internacionales con 45 países en el mundo; esta política se mantuvo en los dos últimos años donde estuvo al frente el Partido Acción Nacional. ¿Por qué es importante la estabilidad en este tipo de políticas públicas que deben de trascender intereses partidistas? Porque los inversionistas extranjeros toman conciencia de la credibilidad de un país en sus políticas públicas.

Comentaba yo con Carlos Lozano que es la única forma de entender como uno empresa como Nissan en Aguascalientes ha sido capaz de ir incrementando su inversión y su exposición en México hasta llegar a producir hoy más de 650 mil vehículos anuales y en su plan de producción para el 2016, 2015, 2016 va a producir un millón de vehículos anuales.

Quiere decir que Nissan ha comprado y ha apostado a la internacionalización de la economía mexicana. Quiere decir que Nissan cree firmemente que la política de comercio exterior es un activo que llegó para quedarse y que no va a cambiar en la definición gubernamental. En este sentido, a partir de ello, el Presidente Peña, a partir de su toma de protesta el primero de diciembre, toma dos decisiones, tres decisiones transcendentales.

Primero una adherencia y una credibilidad total de su respaldo a las políticas… esa política de adherencia la respalda con dos decisiones concretas: Tomar la estafeta en la integración de las negociaciones de la Alianza del Pacífico, el TPP, con 12 economías de Asia y del Pacífico americano en donde la primer reunión de negociación le correspondió a la administración del Presidente Peña, prácticamente a 48 horas de haber asumido la Presidencia de la República.

La siguiente decisión que toma el Presidente es de acelerar el paso para lograr la conclusión de las negociaciones de la Alianza del Pacífico entre México, Perú, Chile y Colombia.

Cuando analizamos la estrategia de comercio exterior vemos claramente la definición en cuatro puntos cardinales: el primero, a partir de la reunión bilateral del Presidente Peña con el Presidente Obama, lograr una profundización en la integración de América del Norte. A 20 años de este Tratado sabemos que lo que ocurrió excedió las expectativas en materia de la zona de libre comercio más grande del mundo prácticamente y también excedió las expectativas en la integración de valor en las cadenas productivas de América del Norte.

Hoy, los productos que se intercambian en América del Norte contienen valores agregados de las tres economías compartida con el CEO de Bombardier, el señor Beaudoin, un panel en Guadalajara el año pasado.

Está construyendo aviones en las tres plantas productivas una parte en Canadá, una parte en México y finalmente la integración en los Estados Unidos. Pero al compartir eso Beaudoin reconocía que llegó a México primero atraído por lo que él llamaba salarios bajos, después se dio cuenta del valor agregado del capital humano mexicano y ahora son ingenieros mexicanos los que está utilizando Bombardier para entrenar ingenieros en todas sus plantas del mundo y para llevar técnicas de los que le llamaríamos troubleshooting o resolución de problemáticas en la línea de manufactura exportadas desde la experiencia mexicana a otras plantas.

¿Qué es lo que tenemos que hacer y cuál ha sido la agenda que el Presidente Peña, el primer Ministro Harper y el Presidente Obama han acordado? La siguiente etapa en América del Norte es, dado el nivel natural de integración, cómo podemos reducir los costos de transacción en la integración de valor en América del Norte. Y ahí concretamente con mi homologa la Secretaria Priztker hemos diseñado una agenda un tablero de control para evocarnos a tres elementos fundamentales.

Primero, la simplificación en los procesos de trámites aduaneros y el mejoramiento de la infraestructura de los puntos de cruce fronterizos. El segundo: la alineación de estrategias de logística en el transporte de mercancías, el diseño de puertos, de carreteras, de cruces fronterizos hacia el futuro, debe diseñarse en forma coordinada entre México, Canadá y los Estados Unidos. El tercer punto es que es increíble que hoy empresas altamente integradas, sectores altamente integrados estén enfrentando regulaciones diferenciales en los tres gobiernos federales. Hay un comité que se estableció para el efecto, para homologar las normas y estándares a los cuales sujetamos a los sectores productivos de América del Norte.

La idea de estos esfuerzos es tratar de reducir los costos de transacción para que esa integración sea más competitiva al poder enfrentar competencia con otras regiones del mundo. Eso es el fortalecimiento en América del Norte, hay otros acuerdos fundamentales con el departamento de comercio de Estados Unidos y el Ministro Fast, mi homólogo canadiense, para poder hacer promoción conjunta en la inversión extranjera en América del Norte.

En primer lugar es obvio que cuando una empresa como Toyota decidió establecerse en San Antonio parecería que habíamos perdido una batalla, pero cuando ustedes analizan la integración de valor de Toyota San Antonio es fundamentalmente de la industria de autopartes mexicano.

Así es que es claro que un dólar invertido en América del Norte es un dólar que favorece a las tres naciones que formamos parte del Tratado del Libre Comercio de América del Norte.

La siguiente decisión que toma el Presidente Peña es restablecer la presencia de México en América Latina y en ese restablecimiento de presencia nos pide redoblar el esfuerzo para cerrar en un plazo breve las negociaciones de la Alianza Pacífico. México había estado ausente en su presencia latinoamericana y desde su período de Presidente en transición en una gira establecida visitó a las dos grandes potencias de Sudamérica, Brasil y Argentina pero incluyó en su gira a los tres socios de la Alianza del Pacífico y sin duda Centroamérica. Desde ahí quedó claro que había que acelerar el paso y fue en febrero 10 de este año que los cuatro presidentes en Cartagena de Indias firmaron la conclusión y el Tratado en materia de comercio e inversión. Este tratado que integramos cuatro economías que representamos prácticamente el 50 por ciento del comercio internacional que sucede en América Latina, fuimos receptores de más del 42 por ciento de la inversión extranjera directa que llega a América Latina. Si sumáramos estas cuatro economías seríamos la octava economía mundial y seríamos la séptima economía en materia de comercio exterior en el mundo. Así es que no es cosa menor esta asociación que va más allá del comercio y la inversión, eliminación de visas para inversionistas, empresarios y profesionistas, lo cual ha aumentado el turismo a México proveniente de Perú y de Colombia en más de un 65 por ciento.

Logramos también un acuerdo que se llama el MILA para poder establecer coordinación entre las cuatro bolsas de valores, de tal manera que desde cada país se puedan hacer operaciones en el mercado bursátil sin pasar por proceso burocráticos entre países. Sin duda, Alianza Pacífico está mandando un mensaje al mundo que hay una América Latina diferente que le da la bienvenida a la inversión extranjera, que tiene marcos legales de protección y de seguridad y que sin duda representa una nueva dinámica en el momento en que ya empezó el proceso de anexión o de entrada a la Alianza. Costa Rica está empezando ya su negociación y enseguida está Panamá que como dijo el Gobernador Lozano acabamos de terminar la negociación bilateral que era un requisito para que Panamá también solicitara ingresar a Alianza Pacífico.

Alianza Pacífico, sin duda con 30 países observadores, tiene una gran cantidad de interesados de convertirse en miembros plenos y esa es la idea, fue una negociación que se concluyó en un tiempo record en 2 años y unos cuantos meses, y fue una negociación que se concentró fundamentalmente en los temas más directos y con gran pragmatismo en los temas de comercio e inversión. El interés mundial por ello se refleja que tenemos como les digo 30 países observadores y una buena cantidad de ellos tratando de ver el proceso de transición para ser miembros de Alianza Pacífico.

Eso nos pone alineados al norte y al sur, pero sin duda con Asia tenemos que reconocer que México había tenido una política incorrecta a través de muchos años; de los 45 países con los cuales tenemos tratados de libre comercio sólo uno corresponde a la región de Asia y es Japón. México no le estaba dando sin duda la importancia a una de las regiones de mayor crecimiento en el mundo. Por ello, la incorporación de México al TPP tiene 3 objetivos fundamentales. Primero, dado que Canadá y Estados Unidos forman parte del TPP es un mecanismo eficiente para poder modernizar el Tratado del Libre Comercio de América del norte a través de la presencia de los tres miembros de NAFTA en el TPP.

Hay capítulos que hace 20 años no eran importantes, como el de comercio electrónico, como por ejemplo el de las empresas pequeñas y medianas, el de las PyMEs, capítulos como por ejemplo el de la propiedad intelectual, donde hace 20 años no existían temas como el de la biotecnología que no era sujeta en estos años a prácticas de protección y de propiedad intelectual.

Así es que por un lado podemos modernizar de base el acuerdo en América del Norte, pero por otra parte también podemos lograr proteger nuestros accesos preferentes a los mercados a través de esta negociación. Sin duda, la negociación no es fácil debido a que incluye muchos capítulos novedosos que no son parte tradicional de las negociaciones comerciales, pero creo que con la voluntad política podremos estar cerrando en el año 2014. En este momento el gran tema pendiente es finalizar el acuerdo de acceso a mercado donde los dos principales países en esta negociación son Estados Unidos y Japón, y sin duda eso es lo que va a destrabar la negociación para poderla concluir en los próximos meses.

Esto nos alinea con Asia y con Europa, ¿cuál es la pregunta? Con Europa arrancamos esta negociación desde el momento de transición con la noticia que la Unión Europea y Estados Unidos anunciaban la negociación del Pacífico. Hubo esfuerzos por parte del gobierno mexicano de mandar la señal a Washington de que era importante considerar que en sentido estratégico sería mejor negociar un acuerdo NAFTA o TLC-América del Norte y Unión Europea como regiones. La respuesta no fue oficial, ni la demanda ni la respuesta, la solicitud y la respuesta no fueron oficiales, pero el comentario en Washington fue la negociación fue sumamente complicada ya que implica negociar con una Unión que representa 28 economías y agregar dos economías más sería tremendamente complicado; para Europa también era políticamente difícil, porque si Estados Unidos aceptaba que nos incorporáramos Europa tenía una presión por parte de Turquía de entrar a la negociación.

Entonces políticamente se convirtió un poco difícil; los centros de estudio norteamericanos, las organizaciones empresariales mexicanas y norteamericanas, todas consideraban que era una estrategia adecuada; ante la imposibilidad de irnos a un tratado regional qué decidió el Presidente Peña. En la reunión en Santiago de Chile de enero del año pasado, solicitó a los comisionados de la Unión que se modernizara el Tratado que México mantiene desde hace 14 años con la Unión Europea para poderlo profundizar y ampliar. Y adicionalmente en la visita con el Presidente Obama el Presidente Peña le planteó que una alternativa sería consultas cercanas para ir siguiendo esta negociación entre Estados Unidos y Europa que no va a ser fácil ni se va a cerrar el día de mañana. Pero para garantizar que el contenido de valor en la producción de América del Norte sea amplio y no sea sujeto a restricciones. De esta manera podemos garantizar que las inversiones europeas en México y norteamericanas en México se vean beneficiadas por un acuerdo que sea flexible en la incorporación de valor y contenido de América del Norte.

Así mantenemos los cuatro ejes cardinales: norte, el sur, el este y el oeste. Pero sin duda, ustedes han visto que tanto la Cancillería mexicana como la Secretaría de Economía hemos abierto zonas de interés preferentes en donde reconocemos falta de actividad. Una de ellas es en la zona del Medio Oriente donde hemos tenido un acercamiento muy efectivo con los Señores Embajadores que representan los países. El señor Canciller acaba de regresar de una gira muy exitosa por el Medio Oriente y seguramente estaremos dándole seguimiento con una gira Presidencial.

Y en Asia si bien TPP nos une y nos acerca con siete economías del Pacífico Sur y del Asia, había un gran interrogante: China. Otra política que hemos conducido de una manera no muy atinada a través de los años. Con China si ustedes se preguntan cada vez que escuchan hablar de México y China, que escucharon hablar en estos últimos 10 años, la noticia era caracterizada por el conflicto, era caracterizada por los problemas de dumping, los problemas de comercio desleal, los problemas de importaciones subvaluadas, que representan fundamentalmente sectores tradicionales como el textil, el calzado, la metal-mecánica, el acero.

El Presidente Peña se propuso relanzar la relación con China y a partir de su visita al foro de Boao, a dos meses de distancia recibió la visita del presidente Xi-Jinping como Visita de Estado y en consecuencia se estableció un relanzamiento de la relación a un nivel de relación estratégica. Los primeros resultados fueron evidentes 10 años intentando exportar tequila a China se solucionó en unos cuantos meses después de esta reunión. La autorización sanitaria para la exportación de carne de puerco mexicana fue lograda con un par de reuniones técnicas para ese proceso.

Pero lo más importante cuando analizamos la relación con China es que del total de inversión extranjera directa que China hace en el mundo a México llega sólo .02 centavos de dólar de lo que invierte China en el extranjero. Es realmente impensable que con el reposicionamiento estratégico de la manufactura en América del Norte no seamos un destino natural de inversiones que provengan de China. Y el segundo tema fundamental con China es cómo cambiamos una relación de conflicto comercial a una relación de Alianza Estratégica; si analizan la balanza comercial, aproximadamente nos venden 60 mil millones de dólares y les vendemos sólo siete mil millones, obviamente cualquiera que ve esos números dice: es un déficit comercial que espanta, 53 mil millones de dólares en contra de México. Pero cuando desintegramos esa balanza comercial nos damos cuenta que el 92 por ciento de lo que importamos de China son insumos que se incorporan en nuestras exportaciones y que las hacen más competitivas. Es darnos cuenta que hoy las balanzas comerciales no se analizan como tradicionalmente se analizaban, cuando considerábamos que la estrategia era cómo vender más bienes finales.

Hoy, la estrategia está en la integración de valor en las cadenas productivas, y en este sentido, es sólo el ocho por ciento de bienes finales donde establecemos la confrontación y el conflicto en textil, calzado, como lo mencioné. Pero eso tiene solución. La Unidad de Prácticas Comerciales Internacionales de la Secretaría de Economía en el último año ha establecido un dinamismo que supera el número de casos en investigaciones dumping y de casos de subsidios indebidos en donde se han tomado más de 13 resoluciones, un número muy superior al conjunto de lo que se había hecho en los últimos 12 años.

Así es que el comercio internacional también tiene sus defensas a través de unidades internas que nos ayuden a establecer mecanismos de castigo a las prácticas del comercio desleal internacional, y de esta forma podemos manejar una relación perfectamente a través de la demostración de comercio ilegal, pero mantener el positivismo de una alianza estratégica comercial con un país tan importante que hoy es la segunda potencia mundial y que seguramente seguirá creciendo de una manera importante.

Finalmente, y realmente para que ya arranquen los trabajos de los paneles de este gran evento, simplemente compartir con ustedes que el proceso de internacionalización de México, no para aquí, el señor Presidente nos ha dado indicaciones de seguir trabajando arduamente por restablecer la relación de México internacional.

Finalmente, y realmente para que ya arranquen los trabajos de los paneles de este gran evento, simplemente compartir con ustedes que el proceso de internacionalización de México, no para aquí, el señor Presidente nos ha dado indicaciones de seguir trabajando arduamente por restablecer la relación de México internacional.

Hemos ya iniciado el compromiso de negociaciones con Turquía, con Jordania. Con ello, completaremos prácticamente un grupo de tratados con economías emergentes que están, somos coparticipantes al nivel del G-20. Por ello, la Cancillería mexicana está integrando el concepto del MICTA, en donde estamos tratando de alinear las estrategias de México, Indonesia, Corea del Sur, Australia y Turquía, para poder establecer una agenda de prioridades justamente en los foros internacionales más importantes.

Así es que los invito a seguir siendo aliados de esta gran estrategia. La Secretaría de manera directa dirige la política de comercio exterior, pero al mismo tiempo nos permitimos coordinar, y en esto agradezco mucho el interés del director de Bancomext, para poder alinear todos los instrumentos del Estado mexicano que nos permitan justamente desarrollar una política de promoción y fomento interno unidos con los gobernadores, aliados con los gobernadores, para poder capitalizar los beneficios que se consiguen con los tratados internacionales.

No es sólo suficiente negociar tratados, sino es fundamental utilizar instrumentos del Estado, del gobierno mexicano, para poder maximizar el uso que hagamos de ellos.

Les agradezco mucho la atención, espero no haber abusado de su tiempo y le deseo a ProMéxico que en este ProMéxico Global tengan un gran éxito y que sigan teniendo en alto el proceso de internacionalización de México. Gracias por su presencia.