DIRECCIÓN GENERAL DE COMUNICACIÓN SOCIAL

México, D.F., 24 de abril de 2015.

 

Versión estenográfica de las palabras del Secretario de Economía, Ildefonso Guajardo Villarreal, con motivo del Anuncio de Inversión de la nueva Planta de Goodyear en México.

 

Con su permiso, señor Presidente.

Buenos días tengan todos ustedes. Para nosotros es un gran placer recibir en esta Residencia Oficial de Los Pinos a toda la familia Goodyear, sus distribuidores, sus comercializadores, y ahora sin duda sus principales directivos…

La industria de autopartes nacional ha tenido dos grandes momentos. El primero fue la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio de América del Norte. Efectivamente, antes de NAFTA, antes del TLC, hubo decretos automotrices que establecieron medidas para impulsar el desarrollo de la industria nacional de autopartes. Sin embargo, la realidad es que antes del 94 teníamos un alto déficit en el comercio exterior de autopartes. Esto indicaba que en el mercado nacional no había una oferta suficiente y competitiva por lo cual las armadoras establecidas en México tenían que recurrir a las importaciones.

Tan sólo en el 93 teníamos un déficit comercial de cinco mil millones de dólares de autopartes. Exportábamos apenas tres mil 900 millones e importábamos nueve mil millones.

El TLCAN vino a cambiar todo esto. Los aranceles para los productos de la industria de autopartes entraron en un proceso de eliminación gradual que concluyó a llevarlos a cero en el año 2003.

Al mismo tiempo, el requisito de contenido nacional que teníamos en el país fue transformado por un contenido regional del 62 por ciento. Esto, sin duda, impulsó la integración productiva de la industria automotriz y de autopartes en el territorio de América del Norte con gran éxito.

El segundo gran momento justamente la industria automotriz lo está viviendo hoy. México está posicionado como el quinto mayor productor de autopartes a nivel global y el séptimo en materia de vehículos ligeros.

Tan sólo en autopartes la industria de autopartes mexicana tiene el 33 por ciento del mercado norteamericano, una de cada tres partes en valor en Estados Unidos viene o llega de México.

Hoy, la balanza comercial a más de 20 años del Tratado, tenemos un superávit en el sector de autopartes de 22 mil 500 millones de dólares.

En este momento estamos desarrollando capacidades productivas para ir mucho más allá de eso.

Por ello, no es casualidad que la decisión de Goodyear ocurra este día. Este día en que atravesamos por uno de los periodos de expansión más importantes en la historia de la industria automotriz mexicana.

Goodyear se suma a esta ola de inversiones y buenas noticias con un monto de 550 millones de dólares invertirá en una nueva Planta para producir neumáticos de alto valor agregado en San Luis Potosí.

Dada la importancia de esta inversión, me permito actualizar la cifra que le di la semana pasada al señor Presidente: en lo que va de su administración se han anunciado, inaugurado o puesto primeras piedras en el sector automotriz y de autopartes por 23 mil 200 millones de dólares; 17 mil 200 en la industria terminal y seis mil millones de dólares en la industria de autopartes.

Goodyear lo sabe. Hoy en México hay un mercado de neumáticos altamente competitivo. Actualmente seis empresas producen llantas en nuestro país además de las muchas marcas que se comercializan y a las importaciones.

Sin embargo, Goodyear tiene un lugar bien ganado en nuestro mercado. Como todas las nuevas inversiones, la de Goodyear es extremadamente relevante en términos de empleo y el efecto multiplicador que tendrá en la economía.

Pero hoy quiero destacar un aspecto más: su contribución al desarrollo de la industria nacional de autopartes. La inversión de Goodyear viene precisamente a fortalecer la cadena de proveeduría de primer nivel, aquella que conocemos como el Tier 1, ese segmento está constituido por todas aquellas empresas que proporcionan a las grandes marcas los componentes e insumos que requieren. A pesar de su importancia, es común que no se mencionen a la hora de hablar del éxito de la industria automotriz.

Hoy es justo decir que el éxito de la industria terminal está fuertemente sustentado en esa gran base, una base fuerte y moderna que está representada por la industria de autopartes de México. Se trata de 860 empresas que abastecen insumos de alta calidad a la industria terminal establecida en México. Sin esta base que sustenta y mueve el sector terminal sería difícil de gozar el éxito que hoy tenemos como país.

La industria, la inversión de Goodyear que viene a reforzar e incluso a modernizar esta base trae a nuestro país un nuevo esquema de producción de mayor valor agregado que combina la más alta ingeniería con la más avanzada tecnología, innovación y ciencia en el terreno de los neumáticos.

Sin duda, el futuro de la industria de autopartes lo estamos forjando hoy. Para consolidar ese futuro existen por lo menos tres nuevos retos para esta industria:

Primero: debe de seguir creciendo a un mayor ritmo que el de la industria terminal, más del ocho por ciento promedio que lo ha hecho en los últimos ocho años.

Segundo: tiene que impulsar, tenemos que impulsar el salto de más empresas mexicanas al Tier 1.

Y Tercero: cubrir la demanda de proveedores Tier 2 y Tier 3 en donde inversiones como la de Goodyear abre una ventana de oportunidad importante para las pequeñas y medianas empresas de México.

Sin duda, la Planta de Goodyear en México sumará inversión, capacidades e innovación que ayudará a la industria de autopartes a superar estos retos y continuar creciendo.

Muchas felicidades a la industria de autopartes del país que hoy recibe a uno de los proveedores neumáticos más reconocidos y de mayor prestigio a nivel global.

Muchas felicidades a toda la familia Goodyear por este nuevo proyecto.

Muchas gracias.