Muchas gracias por invitarnos y por su breve disertación. Exijo reciprocidad, y al mismo tiempo.
Pero ha sido un recorrido fantástico por la historia y, además, que bueno que decidió usted organizarlo de esa manera, en mi opinión, porque aquí estamos una comunidad, aquí están los trabajadores de la salud y aquí están algunos amigos a los que veo allá al fondo, les agradezco muchísimo la presencia de todas y todos ustedes.
Un ex secretario de Salud, que nos da muchísimo gusto.
Varios de los ex directores del hospital.
Pero están los trabajadores, y la comunidad del Gea no puede estar completa si no están los pacientes. Entonces, resulta que nos encontramos aquí con una paciente que hizo historia y que resulta que dice que yo le di clases en la preparatoria cuatro, bueno ella lo dice, pues entonces fui su profesor ni modo, ¿qué le voy a hacer?
Pero qué bueno que estén también los descendientes, los familiares de un extraordinario médico que le dio el nombre, entre muchas otras cosas a una institución como este hospital.
Me da gusto que estén aquí integrantes de la Junta de Gobierno, del Patronato del hospital, directores de unidades de Atención a la Salud, colaboradores de la Secretaría, gracias a todas y todos.
Yo he venido a decirles muchas felicidades. Para tener 70 años, el hospital esta joven, se mantiene bien, se le ve bien y se le ve bien porque una enorme cantidad de generaciones de médicos, de enfermeras, de trabajadoras sociales, de químicos, de odontólogos, de psicólogos, de trabajadores administrativos, de muchos profesionales y técnicos, han hecho una labor muy importante a lo largo de siete décadas.
Mi presencia aquí es para eso, para agradecer -por una parte-, porque lo que aquí se ha hecho en favor de la salud de los mexicanos ha sido muy importante.
Y este ha sido un hospital que ha tenido claridad, que ha tenido rumbo desde hace muchos años y, en efecto, tuvo alguna etapa en la que parecía que su camino era por la vía de la neumología, parecía que ese iba a ser su destino y después resultó que no y, en algún momento, se profundizó en el tema de la cirugía y -en algún momento- la parte de la cirugía reconstructiva y la parte plástica parecía que podían tomar predominio, pero yo creo que el hospital encontró su perfil con el que mejor sirve a la población de la ciudad y de muchos otros, porque este ha sido y es y debe seguir siendo un hospital que sirva como referente, como referencia, como sitio en el que se puedan atender pacientes de muchas partes de nuestro país.
Lo que ha pasado aquí a lo largo de estos 70 años, seguramente no se puede relatar, no se puede contener en un pequeño informe, en una pequeña biografía, porque se requeriría hacer una biografía de muchísimos años, de más de 70, de siete décadas, y de miles de días en los que de manera sistemática y permanente el personal del hospital le ha servido a quienes le confían.
La gente que no tiene con frecuencia otra forma de recibir su atención y a gente que acude y que recurre a una atención de gran calidad y normalmente con un trato humano, con una cercanía, con una calidez que también influye al Gea González.
Este ha sido un hospital al que mucho de nosotros hemos referido a pacientes, este es un hospital al que hemos referido a familiares, como una muestra de confianza y de certeza de que aquí se atiende bien a la gente.
Como dice mi discípula, mi exalumna, ya tengo yo edad para tener nietos y hace poco una nieta mía fue atendida aquí, gracias doctor Mucio, gracias a los colegas que ayudaron a mi nieta, pero es eso porque uno tiende confianza, uno tiene la seguridad de que hay calidad y que hay ese trato humano, en el caso del Secretario más les vale Mucio.
Pero yo sé que así es con todos, no es nada más porque se trata del Secretario de Salud. Bueno, ha habido una gran atención, pero ahí no ha terminado la historia del Gea, ahí no termina.
Este es un hospital de enseñanza, este es un extraordinario hospital para formar personal de salud, no nada más médicos.
Este, por ejemplo, es un sitio en donde los estudiantes de medicina lo seleccionan con mucha frecuencia para hacer el internado o algunas especialidades. Es uno de los sitios privilegiados que los jóvenes que concursan para ser seleccionados, después tienen que ver el sitio donde van a desarrollar su residencia, su especialidad y hay algunas disciplinas, en donde este está en los primeros lugares, probablemente en el primer lugar.
Y este es un hospital, además en donde se ha generado conocimiento, donde se ha dejado constancia de algunos momentos claves para la evolución de la medicina; en donde se ha apoyado el avance del saber y del quehacer en el tema de la salud, y en varios campos, en la parte clínica sí, sin duda.
Pero algunos de nosotros recordamos como aquí en el Gea se desarrollaron proyectos alrededor del tema de la medicina familiar, y por aquí están algunos de los ex directores, algunos en particular, el doctor Mason, que yo creo que ya se salió, no allá está todavía.
Se sabe que fue clave para el desarrollo de la medicina familiar este hospital o cuando allá en los años 70, andábamos viendo algunos de nosotros el tema de referencia y contrarreferencia de pacientes, que hoy nos sigue haciendo falta, pues aquí desarrollamos o se desarrollaron algunos de los estudios.
Entonces, este ha sido un hospital completo y yo quiero decirles que lo han hecho ustedes y quienes estuvieron antes de ustedes. Y que ustedes deben sentirse realmente muy orgullosos de la historia que en el Gea González existe, y deben sentirse orgullosos porque la escribieron ustedes y sus maestros.
Y entonces si ustedes han hecho esto, las mujeres, apenas hace unos cuantos años, no muchos, porque todas son jóvenes, los varones no tanto, como siempre, pero si eso es verdad, y sí lo es, por supuesto que lo es, pues a ustedes es a los que tengo que decirles muchas gracias y muchas felicidades.
Ustedes son parte del orgullo de una gran institución, la Secretaría de Salud, ustedes son una prueba del valor, de la importancia, de la utilidad que tienen los servicios públicos y renunciablemente públicos de salud de nuestro país.
Ustedes han hecho esa historia, y por eso doctor Mucio, a usted, a quienes le antecedieron, a quienes le acompañan, a quienes acompañaron a sus antecesores, a todos y todas los trabajadores de salud, a los colegas médicos y enfermeras muchas, muchas felicidades, pero sobre todo creo que lo puede decir en nombre de una gran cantidad de gente, de pacientes, de personas, de familia que han sido beneficiadas:
Muchas gracias por su entrega, por su compromiso, y por darnos un motivo de orgullo.
Enhorabuena y felicidades por 70 años.
Celebra el Hospital General Manuel GEA González su 70 aniversario
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