El Tribunal Contra las Adicciones del Estado de Morelos será el primero con las características necesarias para garantizar su éxito, afirmó el Comisionado Nacional contra las Adicciones, Fernando Cano Valle, al participar en la instalación de dicho tribunal, el cual se conoce como el segundo en su tipo en México.

Los modelos de justicia alternativa –señaló– tienen como objeto atender a las personas con adicciones que cometieron una conducta ilícita, desde una perspectiva de beneficio social para lograr su reinserción y rehabilitación.

Explicó que son una respuesta eficaz hacia una intervención con enfoque terapéutico, pues representa una visión altamente humanista en la impartición de justicia de los tribunales.

Luego de dar a conocer que en los últimos cuatro años las adicciones en Estados Unidos ha adoptado un enfoque de salud pública y no criminal, razón por la cual el país vecino cuenta con más de dos mil 600 tribunales, el comisionado aseguró que el de Morelos fincará su éxito en diversas estrategias como la definición de un catálogo de delitos, la integración de un diagnóstico del paciente y la definición de criterios legales y sanitarios.

Enfatizó la importancia de tratar a los adictos como enfermos y no como delincuentes, debido a que el consumo de drogas provoca cambios bioquímicos en el cerebro, “lo que hace muy difícil que las dejen por sí solos”.

La presidenta del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Morelos, Nadia Luz María Lara Chávez, aseguró que la función primordial de los jueces es mantener una postura neutral, pero también de convertirse en facilitadores de un tratamiento que permita al adicto iniciar un proceso de readaptación social, razón por la cual, dijo, el tribunal  contra las adicciones es un proyecto trascendente que será direccionado por el gobierno federal. 

Aníbal Enrique Quiñones Abarca, representante en México de la Organización de Estados Americanos (OEA), indicó que el tribunal de Morelos está enmarcado en los propósitos fundamentales de la OEA y de las sociedades democráticas contemporáneas.

“El modelo de tribunales de tratamiento de adicciones instrumenta un tema que es prioritario para la OEA, el de la búsqueda de soluciones a problemas reales ante los que un enfoque tradicional ha demostrado no dar los resultados que nuestras sociedades necesitan”, abundó.

Ofrecer al individuo –dijo– una ruta de integración en la que encuentre trabajo, entornos familiares y comunitarios favorables, y el resto de los aditivos que, junto con el respeto de los derechos humanos, la salud y la justicia, hagan que el individuo pueda vivir como un auténtico ciudadano.

El director general de Participación Ciudadana para la Prevención Social de la Violencia y la Delincuencia, Xiuh Guillermo Tenorio Antiga, celebró la instalación del tribunal ya que las adicciones son un problema de salud pública.

 


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