La leucemia mieloblástica aguda es una de las enfermedades que tienen mayor índice de mortalidad en la población menor de 18 años, debido a que durante el proceso de tratamiento, los pacientes tienen repetidos cuadros infecciosos. No obstante, el Servicio de Hematología del Instituto Nacional de Pediatría (INP), logra hasta 50 por ciento de sobrevida a cinco años en estos pequeños.
Así lo informó la doctora Norma López Santiago, hematóloga pediatra del Instituto Nacional de Pediatría, quien puntualizó que este porcentaje de sobrevida es similar al que registran algunas naciones desarrolladas.
Al participar en la Tercera Reunión Internacional de Leucemias que lleva a cabo este Instituto, indicó que aunque no se tienen cifras en nuestro país sobre la prevalencia de la enfermedad, estudios en Estados Unidos indican que afecta a siete niños por millón de menores de 18 años.
La especialista detalló que uno de los problemas que enfrenta la comunidad médica para tratar este tipo de leucemia es que los medicamentos que se tienen hasta el momento son muy tóxicos, aunado a que estos pequeños son más susceptibles a padecer procesos infecciosos durante el tratamiento.
Señaló que estudios realizados sobre esta enfermedad indican que existen ciertos picos de prevalencia en niños de dos y 10 años, ante ello alertó a los padres de familia para que pongan especial atención en la salud de sus hijos en estas edades.
Entre los principales síntomas de la leucemia mieloblástica aguda se encuentra la reducción de la actividad física del niño, debido a una baja de producción de las células de la sangre, lo que clínicamente se conoce como anemia.
“El niño tiene menos energía para desarrollar sus actividades diarias, por lo tanto se fatigará y tendrá que descansar varias veces durante sus tareas”, mencionó.
Otros de los signos de alarma es la presencia de fiebre sin causa aparente, hemorragias nasales, moretones y dolor en las extremidades del cuerpo.
La doctora López Santiago detalló que cuando el menor ingresa a este Instituto con estos síntomas, de inmediato es sometido a una revisión clínica y posteriormente a estudios de biometría hemática y química sanguínea, para posteriormente confirmar el diagnóstico a través de un aspirado de médula ósea.
Resaltó que el diagnóstico se obtiene en aproximadamente 48 horas e inmediatamente se inicia con el tratamiento.
En términos generales los pacientes con leucemia mieloblástica aguda tienen que ser hospitalizados en promedio 45 días, tiempo el cual se controla la enfermedad, para posteriormente continuar con su tratamiento de forma ambulatoria.
Finalmente, dijo que cada año el servicio de hematología del INP recibe 85 niños con leucemia, de ellos aproximadamente siete son diagnosticados con leucemia mieloblástica aguda.
