El Instituto Nacional de Perinatología es punta de lanza en brindar acompañamiento psicológico a las mujeres que padecen cáncer durante el embarazo, incluso se han desarrollado diferentes protocolos de investigación alrededor del tema. “Somos de las pocas instituciones que cuentan con un equipo multidisciplinario para ofrecer una atención integral a las pacientes con cáncer del Instituto”, aseguró la investigadora en ciencias médicas del INPer, María del Pilar Meza Rodríguez.

Uno de los objetivos principales de la atención psicológica que se brindan en el INPer es que la mujer con cáncer de mama retorne a su estilo de vida cotidiano y que logre capitalizar todas las condiciones de dolor, sufrimiento y sentimientos adversos que existen alrededor de la enfermedad, que logre valorarlos lo suficiente para favorecer este crecimiento a nivel personal y psicológico, dijo la investigadora integrada al servicio de oncología del INPer.

 

La detección de casos en etapas tempranas amplía la oportunidad de recibir un manejo adecuado, destacó Gonzalo Márquez Acosta, jefe de la coordinación de Oncología del INPer, durante el 6º Curso “Enfermedades de la mama”, que concluyó con éxito el día de hoy, al presentar la diversidad de opiniones y experiencias de especialistas provenientes de distintas instituciones de salud en nuestro país.

Durante la conferencia magistral “Cáncer de Mama y Embarazo”, Carlos Aranda Flores, especialista del Instituto Nacional de Perinatología, explicó que “debido a la tendencia de la sociedad a postergar el embarazo después de la tercera década se proyecta un aumento en la incidencia de cáncer, la cual es más alta en mama, por lo que realizar el diagnóstico a través del examen mamario en la primera consulta prenatal es fundamental”.

El especialista destacó que muchas veces se confunden los cambios fisiológicos de la mujer en el embarazo con el cáncer de mama, por lo que es importante considerar como síntomas de alarma el dolor en la mama, secreción en el pezón, erosión en la piel y notar la persistencia de algún nódulo o bolita durante más de cuatro semanas.

El cáncer de mama durante el embarazo camina rápidamente a metástasis en axila, por lo que el pronóstico de supervivencia empeora, aseguró el especialista.

“El tratamiento de la mujer embarazada con cáncer de mama debe ser multidisciplinario, incluyendo al equipo oncológico y el obstétrico, idealmente con un subespecialista en medicina materno fetal, tal como se atiende en el INPer”, expresó.