Esta receta tiene sus raíces en el periodo prehispánico, aunque algunas de ellas adquirieron fama durante la colonia, integrando ingredientes que los españoles trajeron con ellos.

El mole más famoso es el poblano, pero no es el único.

En Oaxaca, donde se puede encontrar la mayor variedad, se dice que “para cada fiesta hay un mole”. Así que, por ejemplo, se prepara mole blanco para las bodas; pero también los hay verdes, negros, rojos y amarillos, que adquieren el sabor y color a partir de los ingredientes con que se elaboran.

Las recetas varían de región en región, incluso de familia en familia, sin embargo, los ingredientes básicos son chile, especias, maíz y chocolate, aunque este último puede o no incluirse, y se sirve con algún tipo de carne, generalmente pollo o guajolote.

La palabra mole es de origen náhuatl y significa salsa, se puede encontrar en otras palabras del español del mismo origen como en guacamole