El altar se realiza para honrar la memoria de algún ser querido o admirado.

Adquiere diversas formas y contiene varios niveles según el lugar en que se realice. Así, por ejemplo, se encuentran de dos, tres y siete niveles, representando:

El de dos niveles el cielo y la tierra; el de tres incluye los anteriores y el inframundo, y el de siete los siete lugares que el alma ha de atravesar para alcanzar su descanso.

Entre los elementos que incluyen un altar están:

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  • El olor, que simboliza la purificación del alma y puede representarse con plantas aromáticas o con copal.
  • Arco, simboliza la entrada al más allá y se coloca en el nivel superior, hecho con palmilla o carrizo.
  • Papel picado, para representar el viento, así los colores amarillo y morado se utilizan para significar pureza y duelo.
  • Velas, veladoras o cirios, como representación del fuego. Se colocan cuatro cirios para representar una cruz y los cuatro puntos cardinales.
  • Agua, que tiene múltiples significados entre los cuales está el de calmar la sed del espíritu. Se coloca un vaso lleno de agua.
  • Tierra, que se representa por medio de diversas semillas, frutos y especias. Así mismo, se utiliza aserrín pintado de diferentes colores para representar este elemento.
  • Flores, el cempasúchil, la nube y el amaranto o manto de candela son las especies más utilizadas para el adorno de un altar.
  • Calaveritas de azúcar con el nombre del difunto o difuntos a quienes está dedicado el altar.
  • Comida, según la tradición, debe ser del agrado del fallecido, así mismo incluir pan de muerto.
  • Objetos personales del difunto, entre los que se ha de incluir alguna fotografía del mismo.
  • Objetos religiosos; cruces o imágenes de santos.
  • Perro, éste representa al guía del difunto hacia el cielo.