El Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol) transmitió la teleconferencia Las carencias: un tema de corresponsabilidad, la segunda del curso Joven Agente de Cambio (Joven AC). Ésta tuvo el objetivo de despertar el interés en la atención de indicadores como carencias, conocer que estrategias se han implementado para atenderlas y explicar el modelo de interacción del Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve).

Jimena Valdés Figueroa, subdirectora de Integración y Actualización del Imjuve, explicó que, si bien el ingreso es importante en la medición de la pobreza, es necesario tener en cuenta otras dimensiones, por lo que el CONEVAL, de acuerdo con la Ley General de Desarrollo Social considera como carencias: rezago educativo; acceso a la salud, a la alimentación, a la seguridad social; calidad y espacios en la vivienda; así como servicios básicos de la vivienda y la cohesión social.

La funcionaria informó que 13.8% de jóvenes tiene carencia por rezago educativo; 22.5% no cuenta con ningún tipo de servicio de salud; 67.3% no cuenta con acceso a seguridad social; 13.8% tiene carencia por calidad y espacios de la vivienda; 22.2% presenta carencias en acceso a los servicios básicos en la vivienda; 24.6% carece de acceso a la alimentación. Asimismo, dijo que las entidades con mayor índice de carencias e ingreso inferior son: Chiapas, Michoacán, Guerrero, Veracruz y Oaxaca.

Para explicar las acciones que la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) realiza para atender estar carencias, asistió Nalleli Esperanza Torres González, jefa de departamento de la Secretaría Técnica de la dependencia, quien habló de la Cruzada Nacional contra el Hambre (CNcH), que surgió para atender la pobreza extrema con carencia de acceso a la alimentación en la que se encontraban 7.01 millones de personas al inicio de la administración. Mencionó que en esta estrategia participan autoridades de los tres órdenes de gobierno, organizaciones civiles y el sector privado.

Este año, se encuentran incluidos en la Cruzada los 2 mil 457 municipios del país, incluidas las 16 demarcaciones de la Ciudad de México y como resultado se ha reducido la población en pobreza extrema con carencia alimentaria a 4 millones 289 mil 918 personas.

Sabino Arturo Barrera Bravo, director de enlace con Organizaciones Juveniles del Imjuve, informó que para incorporar a las y los jóvenes al desarrollo del país se debe garantizar un pleno ejercicio de sus derechos y evitar situaciones como “la reproducción intergeneracional de la pobreza”. Por ello, el Imjuve cuenta con un modelo de “Empoderamiento Juvenil” que fortalece la participación de este sector en espacios de decisión públicos, sociales y comunitarios.

Para lograr lo anterior, este modelo se basa en 6 principios de acción: ciclos de talleres y conferencias para contactar con jóvenes interesados en realizar proyectos sociales; apoyo a proyectos sociales de colectivos y grupos juveniles; asesoría y apoyo para la constitución legal; la convocatoria realizada en coinversión con el Indesol: Pro-juventudes: proyectos y acciones en pro del desarrollo juvenil; ciclos de conferencias a distancia; así como vinculación, encuentros juveniles y foros de opinión.

A la sección Mejores Prácticas de la sociedad civil e innovación social, asistió Gabriela Rocha, directora general de Laboratoria México, una empresa de tecnología que empodera a mujeres jóvenes de entre 18 y 35 años que no han tenido acceso a educación superior de calidad, con una formación para que se incorporen en el sector digital con empleos bien pagados, lo que les proporciona una mejor calidad de vida. Este año, de sus tres sedes (Chile, México y Perú) se graduarán 400 nuevas programadoras. Para mayor información consulta: http://laboratoria.la/