En 1992, la Asamblea General de Naciones Unidas proclamó el 3 de diciembre como el Día Internacional de las Personas con Discapacidad a fin de impulsar medidas orientadas al constante mejoramiento de la situación de las personas con discapacidades y a la consecución de la igualdad de oportunidades para éstas.

Este año, la conmemoración se centra en promover los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) necesarios para alcanzar un futuro más próspero y destacar el papel que desempeñan estos objetivos recién establecidos en la construcción de un mundo más inclusivo e igualitario para las personas con discapacidades.

Aún queda mucho por hacer para que las personas con discapacidad puedan alcanzar su potencial como miembros de la sociedad valiosos y en pie de igualdad, teniendo como reto principal el de eliminar los estereotipos y la discriminación que perpetúan su exclusión y crear un entorno accesible e inclusivo para todos.

De acuerdo a la información del Programa Nacional de Juventud (Projuventud) 2014-2018, con respecto a la discriminación que ejercen las y los jóvenes, al ser cuestionados sobre con quiénes no estarían dispuestos a compartir su hogar, uno de cada 10 puntualizó no estar dispuesto a vivir con personas con discapacidad.

Asimismo, el documento informa que en 2012, en México existían 0.7 millones de jóvenes entre 12 y 29 años con alguna discapacidad, siendo las principales: no ver aun usando lentes (24.8%); dificultad para caminar, moverse o subir (27%); tener alguna limitación mental (16.2%); y hablar, comunicarse y conversar (16.1%).

En el análisis por género, se observa que la principal dificultad funcional que enfrentan las mujeres es no ver aun usando lentes (28.5%) y los hombres caminar, moverse, subir o bajar (26.4%), mermando en ambos casos, el desarrollo no sólo educativo de estos grupos, sino también en distintos aspectos como el laboral.

Si bien el Projuventud es en atención a la población joven en su conjunto, son grupos prioritarios, entre ellos jóvenes con discapacidad, los núcleos poblacionales que por diferentes factores o la combinación de los mismos, enfrentan situaciones de riesgo o discriminación que les impiden alcanzar mejores niveles de bienestar.

De tal forma, el Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve) recomienda a través de este documento, difundir acciones educativas que atiendan a las y los jóvenes con discapacidad, así como diseñar iniciativas adecuadas para mejorar la inserción a un trabajo digno, decente y de calidad para este sector de la población.

Asimismo, formula promover proyectos de inclusión social para jóvenes con discapacidad que los ayude a enfrentar situaciones de discriminación y desventaja, fortalecer los mecanismos operativos de atención integral, y diversificar la oferta educativa para disminuir la brecha educativa de la población con discapacidad.

Finalmente, establece la importancia promover la adecuación de espacios para garantizar el derecho a la accesibilidad de las y los jóvenes con discapacidad, y fomentar de manera coordinada y transversal, acciones en los programas sociales que contribuyan a la inclusión y al desarrollo de la población joven discapacitada.

 

 

IMJUVE /2016-B156

Ciudad de México, a 03 de Diciembre de 2016