En la temporada de Cuaresma México vive, por cuestiones culturales, la más importante etapa de incremento en el consumo de pescados y mariscos en el año, que incide favorablemente en la nutrición y la salud de la población, gracias a las propiedades de los productos del mar y a nuestras mejores tradiciones culinarias y gastronómicas, señaló el titular de la Comisión Nacional de Acuacultura y Pesca (CONAPESCA), Mario Aguilar Sánchez, al apuntar que lo deseable es que esta situación se pudiera extender a los 365 días del año.

“Es una gran época del año, donde los mexicanos recordamos que por cuestiones culturales, pero también nutricionales, tenemos que comer pescado, y la gran fortuna es que comemos pescado cada vez más, lo que es un gran acierto porque hay grandes ventajas para las personas”, dijo en entrevista.

Explicó Mario Aguilar que los beneficios del consumo de pescado durante la infancia son muy importantes en términos de salud, pues los niños, los bebés y las madres lactantes, al comer pescado en los primeros mil días, desde que inicia la gestación, hasta varios meses de edad, se acelera el desarrollo neurocerebral de los niños de una manera importante.

El segundo gran beneficio de comer pescado, está asociado con la salud de los adultos. En la medida que comamos más pescado, según la Organización Mundial de la Salud, organismo de las Naciones Unidas, se reduce de manera importante el riesgo que hay para afectaciones al miocardio, problemas coronarios, es decir, del corazón, de tal suerte que comer pescado además de ser muy consistente con nuestras tradiciones que inician hoy con la Cuaresma, tiene un gran beneficio para la salud, y desde luego en la economía de los pescadores, agregó.

Expuso el titular de la CONAPESCA que en este sentido, “la gran ventaja que tiene nuestro país, es que contamos con un sector pesquero y acuícola sumamente pródigo, cada vez más productivo, que no hace más que poner al alcance de los consumidores la magnífica proteína derivada de la pesca; proteína casi milagrosa, por decirlo coloquialmente, que está a disposición de los mexicanos”.

Detalló el Comisionado que en el territorio nacional se tienen más de 200 especies comerciales a lo largo del año y en esta época es amplia la disponibilidad  y la accesibilidad económica para los consumidores, desde las tradicionales especies como sardina, atún,  mojarra o tilapia, huachinango, lisa, calamar, y otras especies regionales, de acuerdo a la zona del país, subrayó que en Cuaresma, o en cualquier época del año, el mejor pescado es el más próximo al lugar donde se consume, el que esté más fresco.

“Para quien vive en Yucatán, seguramente un mero o alguna especie local como el carito, serán un gran pescado que comer, si vive en un estado en aguas interiores, seguramente va a encontrar tilapia, o carpa, o bagre, o trucha, y ese es un gran pescado. Si vivimos en el Pacífico, probablemente vamos a tener un buen camarón, cada vez más accesible al consumidor mexicano y vamos a tener un pargo, y si vivimos en una zona muy alejada de las áreas de producción, nunca va a faltar una magnífica lata de atún, o de sardina”, dijo.

Apuntó finalmente Mario Aguilar que todas esas especies mencionadas tienen un extraordinario valor nutricional y proteínico, “probablemente no hay proteína más importante, desde el punto de vista nutricional, que la que proviene de la carne y la pulpa de los pescados y mariscos, que tenemos en México”, concluyó.