La presencia de ambos reptiles es indicador de la salud de los humedales y cumplen un papel importante en el equilibrio de los ecosistemas acuáticos al regular a otras poblaciones de vertebrados y contribuir al ciclo de transformación de nutrientes.

La CONANP, desde 1994, realiza estudios de monitoreo en conjunto con universidades y organizaciones de la sociedad civil, con el fin de generar información sobre su estatus poblacional que permita plantear acciones de conservación.

Continuamente implementa estrategias de identificación, prevención, monitoreo y manejo para lograr la convivencia y mayor conocimiento de la especie, con la finalidad de conservarla y reducir los riesgos de ataque.

La participación de instituciones como el Colegio de la Frontera Sur, el Instituto Nacional de Ecología y el Instituto de Historia Natural de Chiapas ha sido fundamental para el desarrollo de investigación, monitoreo, vigilancia y conservación con lo que se ha logrado establecer la línea base para el monitoreo de los cocodrilos.

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