Ciudad de México, a 16 de febrero de 2017 (CONADE).- Incluir la actividad física en parte de nuestros hábitos siempre será benéfico para la salud, lo que en ocasiones genera duda sobre realizar el ejercicio adecuado, para esto, existen dos tipos de clasificaciones, los llamados aérobicos y los anaeróbicos, pero ¿qué son y cuál es la diferencia?

El entrenador de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (CONADE), Hugo Alberto Silva Hernández, mencionó que la diferencia entre ambos ejercicios es el tiempo y la intensidad.

“El ejercicio aérobico es el movimiento continuo y el anaeróbico es pausado, con el primero se obtiene mayor condición física, mejor respiración y oxigenación; con el segundo se logra más fuerza,”, explicó el especialista.

Al realizar actividad física, se genera buena salud y una mejor calidad de vida; sin embargo, Hugo Silva destacó que para realizar cualquier ejercicio, se debe tomar en cuenta la edad y la complexión física, generalmente cuando se marca como objetivo el bajar de peso o ganar masa muscular.

AÉROBICO, UN MÉTODO DINÁMICO

Los ejercicios aeróbicos, también son conocidos como “dinámicos”. Dentro de esta clasificación, se encuentran los de baja y mediana intensidad, los cuales son utilizados comúnmente para bajar de peso, ya que permite quemar grasa con mayor rapidez, por ejemplo, hacer bicicleta, correr o realizar natación.

Al poner en práctica este método, el organismo tiene un consumo mayor de oxígeno, ayuda a evitar enfermedades cardiovasculares, disminuir la presión arterial, niveles de colesterol y de glucosa en la sangre.

Cabe señalar que de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS). Las enfermedades cardiovasculares son responsables de 17 millones de muertes en el mundo, representando un 29.82%.

En México, según el Sistema Nacional de Salud, el 19% de mujeres y hombres de 30 a 69 años de edad, fallecen a causa de enfermedades cardiovasculares.

Nuestro país arroja cifras a considerar y el deporte es una vía para contrarrestar números como los más de 17 millones de hipertensos, 14 millones de dislipidémicos (alteración del metabolismo de los lípidos), 6 millones de diabéticos, 35 millones de adultos con sobrepeso u obesidad y 15 millones con grados variables de tabaquismo.

ANAERÓBICO, MAYOR ESFUERZO Y ALTA INTENSIDAD

El ejercicio anaeróbico, nombrado también como “estático”, trata de aquellas actividades físicas que requieren más esfuerzo, caracterizados por ser de alta intensidad, como levantar pesas u otro tipo de actividad para tonificación musculo esquelético; se llevan a cabo en series de corto tiempo.

Los beneficios que aporta enlistan la mejora de flexibilidad, elasticidad y resistencia del cuerpo, esto debido a las repeticiones del ejercicio, así como disminuir la cantidad de grasa y fortalecimiento de las articulaciones.

UNA FUSIÓN SOLO PARA EXPERIMENTADOS

El preparador físico de la CONADE enfatizó que para obtener mejores resultados es conveniente que las personas alternen sus rutinas combinando ambos métodos, tal como se hace en los circuitos, esto solamente cuando se tenga cierto tiempo realizando ejercicio, ya que para comenzar es importante no excederse, “hay que ir de menos a más”.

“El músculo te responde hasta hora y media de entrenamiento, después se empieza a desgastar, pero también se daña el cuerpo con la alimentación, ya que si no se complementan resulta perjudicial. Además es importante hacer los movimientos correctos, de lo contrario y si hay un exceso de peso se pueden dañar las articulaciones”, compartió Silva Hernández.

La recomendación del experto de la CONADE, se basa en iniciar una rutina con 10 a 20 minutos de ejercicio cardiovascular (bicicleta, caminadora, elíptica) y continuar con un circuito de pesas o aparatos, ya que de esta forma se le da movimiento a cada músculo del cuerpo (hombro, bíceps, tríceps, pecho, espalda, abdomen, glúteo, cuádriceps, femoral y pantorrilla), para lograr un complemento entre ambas clasificaciones y no una sustitución.