Del 1 al 5 de mayo se llevó a cabo en la Ciudad de México la 23 Reunión del Comité del Codex Sobre Sistemas de Inspección y Certificación de Importaciones y Exportaciones de Alimentos (CCFICS23).


Para poder entender su importancia y trascendencia, primero hay que aclarar ¿qué es el Codex Alimentarius? Su nombre está en latín, significa “código alimentario” y fue establecido en 1963 por la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura para elaborar normas internacionales armonizadas para comerciar alimentos y al mismo tiempo proteger la salud de quienes los consumen.


El objetivo del Codex es garantizar que los alimentos que se comercian en todo el mundo sean inocuos. Las normas del Codex están diseñadas para que tanto importadores como exportadores de alimentos tengan la seguridad de que lo que venden y compran es inocuo y de calidad.


Estas normas se elaboran con una base científica en temas como biotecnología, plaguicidas, aditivos alimentarios y contaminantes. Si bien no son leyes obligatorias, sí funcionan como referente para legislaciones nacionales de muchos países.

Como es fácil suponer, las áreas de trabajo del Codex son muy amplias y para poder abarcarlas todas se crean comités encargados de elaborar las normas y resolver las controversias que surjan de su aplicación.


Uno de esos comités es el de Sistemas de Inspección y Certificación de Importaciones y Exportaciones de Alimentos CCFICS, cuya reunión más reciente se llevó a cabo en México. 


La presidencia de este comité se va rotando entre los países miembros, ahora la tiene Australia, por lo que Greg Read, primer Subsecretario de la División de Exportaciones del Departamento Australiano de Agricultura y Recursos Hídricos, es presidente pro tempore del CCFICS.

De acuerdo con Read, uno de los objetivos principales de la reunión en México fue continuar con los trabajos en una guía que ayude a evaluar la eficacia de los sistemas nacionales de control de alimentos.

En opinión de Read, la inocuidad de los alimentos es responsabilidad de los operadores de empresas alimentarias y de una eficiente supervisión reguladora gubernamental.

“La inocuidad de los alimentos para los consumidores no debería verse comprometida por la situación económica del país”, expresó.

Como resultado de la 23 reunión de CCFICS, México fue electo como co-presidente de Grupo de Trabajo sobre Sistemas de Aseguramiento por parte de Terceros en Materia de Inocuidad Alimentaria, lo que fortalece la presencia de nuestro país y reconoce el trabajo realizado en el contexto de las agencias reguladoras a nivel internacional.


El grupo de trabajo será presidido por Nueva Zelanda y una co-presidencia más estará a cargo de Canadá.


En el marco de la 23 sesión del CCFICS de Codex se realizó la Semana Nacional de Alimentos, del 3 al 5 de mayo, organizada por COFEPRIS. El evento contó con la participación de autoridades sanitarias federales y estatales, así como de representantes de la industria, la academia y especialistas del sector alimenticio, con el objetivo de coordinar acciones de inocuidad de alimentos en favor de la salud de la población y el desarrollo de la industria.


En cinco mesas de trabajo presididas por especialistas de la COFEPRIS se evaluaron temas relacionados con el uso de mejores prácticas internacionales, marco analítico, trazabilidad de alimentos, fomento sanitario y simplificación de trámites, con el objetivo de disminuir la carga regulatoria y promover el crecimiento ordenado de la industria de los alimentos.


Cabe destacar el acuerdo firmado entre COFEPRIS y la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados a través del cual los establecimientos agremiados incluirán en sus menús, cartas o escaparates las calorías que contienen los alimentos y bebidas no alcohólicas, así como el porcentaje que representan en la dieta diaria.

Con todas estas acciones, la COFEPRIS sigue trabajando para que en México alimentación sea sinónimo de salud.